El cigarro de Torricelli
El Juventus ha cogido como costumbre jugar la final de la Liga de Campeones. Lleva tres años consecutivos haciéndolo. Y, tal vez por eso, sus futbolistas vivieron los días y las horas previas a la cita ante el Madrid con la mayor naturalidad del mundo. El Madrid enseña ansiedad, nervios, gestos de estar viviendo un acontecimiento único. El Juventus, en cambio, tiene una pose tranquila, convincentemente calmada. Baste un ejemplo como prueba: Torricelli, en hora punta de tráfico de periodistas y directivos, se fumó un cigarro semitumbado en un sillón, saboreando cada calada. Ni los jóvenes parecían alterados. Si acaso Del Piero, pero más por lo engorroso de su popularidad, que por el partido en sí. Y todos aseguran haber dormido estos días a pierna suelta. Bueno, menos Di Livio: "¿Quién puede dormir antes de una final? Mis compañeros dirán lo que quieran, pero a mí me cuesta. Siento mucho el partido. Noto fatiga y por eso busco fórmulas para concentrarme".Los italianos vuelven por tanto a encontrarse en el mismo sitio que el año pasado y que el anterior. Y llegan en las mismas condiciones de aparente superioridad, de mejor adaptación a la liturgia de estos choques, de favoritos. Pero el curso pasado todas esas ventajas no le valieron: apareció el Borussia y ganó contra todo pronóstico. Tal vez para evitar que el Madrid apoye en torno a esa teoría sus sueños de triunfo, los juventinos se empeñaron ayer en advertir en voz alta que lo del curso pasado no es una referencia fiable.
"Este año estamos mucho mejor", afirma Di Livio, "porque hemos tenido menos lesiones. En la temporada pasada hubo muchas y eso provocó que jugáramos siempre los mismos. Entonces, llegamos más cansados, exhaustos". Físicamente, por tanto, el Juventus llega mejor. Y, además, mejor preparados, como dice Marcelo Lippi: "En la otra ocasión, sólo tuvimos cuatro días. Ahora, como nos proclamamos campeones de Liga hace más tiempo, los jugadores se han podido desenganchar mentalmente. Descansaron dos días y ya trabajamos diez días seguidos sólo pensando en la final".
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