_
_
_
_

"Hay que defender la ética en los Juegos"

Los Juegos tienen problemas, pero apenas para Juan Antonio Samaranch. El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI) ha visto tantos desde que tomó posesión en 1980 que es optimista por naturaleza y los desastres de Nagano los reduce al mal tiempo. Cuando recuerda, por ejemplo, que entró en el cargo en medio de una de las tormentas más graves del olimpismo, con el boicoteo de Estados Unidos a los Juegos de Moscú por la invasión soviética de Afganistán, lo de ahora le parece una broma. Y sonríe cuando lo compara con tantas tensiones y presiones que superó después. Incluso cree que los mismos norteamericanos van a respetar la Tregua Olímpica por la que ha trabajado intensamente. Le ha escrito hasta a Saddam Hussein. También al Papa. Y sobre el último escándalo de la marihuana, para lo que ha creado una comisión de estudio, tiene claro que aunque sea una droga blanda el COI la va a perseguir porque es necesario preservar los valores rnorales de olimpismo.Pregunta. El COI, que había votado por la descalificación del campeón de snowboard, ha aceptado la decisión del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) de mantenerle la medalla, pero usted ha decidido volver a la lucha...

Más información
Rusia recupera la cabeza del medallero
Maier supera la enésima suspensión Hakuba

Respuesta. Sí, hemos creado un grupo de trabajo, que seguramente va a recomendar al CIO que la marihuana tenga el mismo castigo que cualquier otro dopaje. Aunque sea una droga blanda puede ser el principio de otras cosas peores. El grupo de trabajo está formado por los cuatro vicepresidentes del COI, el húngaro Pal Schmitt, el canadiense Richard W. Pound, la norteamericana Anita DeFrantz y el juez senegalés Keba Mbaye, así como el príncipe belga Alexandre de Merode, presidente de la comisión médica.

P. ¿El COI va a ir por delante de la sociedad, que en muchos lugares no tiene legislación prohibitiva?

R. Hay que defender la ética de los Juegos.

P. ¿Y será operativo para sancionar aquí mismo en Nagano si se repite algún otro caso?

R. No, pero sí estará antes de Sydney, en el 2000, por lo que allí sí se podrá aplicar.

P. Es decir, que si se volviera a producir un positivo con marihuana sucedería lo mismo que con Ross Rebagliati, que no podría sancionársele...

R. No pasaría nada, porque el reglamento seguiría siendo el mismo y mientras exista en él la palabra inglesa may, puede, es decir, que puede ser sancionado, pero no dice taxativamente que sí, queda una laguna que no se puede salvar jurídicamente. La idea entonces es suprimir el may, del reglamento. Esa es más o menos la idea. El TAS, aunque jurídicamente no pudo descalificar a Rebagliati por falta de reglamentación ("Si los organismos deportivos quieren añadir sus propias sanciones a las que ya están previstas por las autoridades públicas debe hacerlo de forma expresa", señaló), también lo condenó de forma pública con un comunicado posterior muy duro y elocuente: "El fallo, de ninguna manera significa que el consumo de la marihuana debe ser permitido. Tampoco sugerimos que las autoridades deportivas no tengan la potestad de excluir a los atletas de las competiciones por esta razón. Desde un punto de vista ético y médico el consumo de marihuana supone una gran preocupación social".

P. El caso de la marihuana ha sido el problema estrella, pero los Juegos están teniendo muchos fallos...

R. La organización es la mejor que me he encontrado en mi vida. En rapidez de resultados, transporte, orden, instalaciones, amabilidad... Todo funciona, menos el tiempo.

P. Ayer se volvió a suspender el supergigante masculino. Queda una semana solamente y de seguir así no se va a poder terminar el esquí alpino...

R. Faltan siete pruebas, pero se pueden disputar algunas el mismo día.

P. ¿Se va a respetar la Tregua Olímpica?

R. Falta una semana y creo que lo podemos ganar.

P. ¿Ha hablado con Clinton?

R. No, con el secretario de Estado y con altas personalidades mundiales, como Helmuth Kohl o Jacques Chirac. Y estamos en contacto con todos los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU. También le he escrito una carta a Saddam Hussein y otra al Papa.

P. ¿Tiene datos para ser optimista?

R. Hasta ahora está anunciada la visita de la mujer del vicepresidente de Estados Unidos, Tippy Gore, como máxima personalidad del país para los Juegos. Iba a estar en la inauguración y no vino. Si lo hace ahora parece algo significativo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_