Lamento por Madar

Tan desesperante es la falta de delanteros en el Deportivo que muchos ya se acuerdan de Mickael Madar, el punta francés que Silva expulsó de la plantilla en la pretemporada por su carácter pendenciero. Ningún equipo está dispuesto a hacerse cargo de la elevada ficha de Madar -200 millones de pesetas brutos al año- y el futbolista se dedica a vivir en A Coruña unas vacaciones doradas.No es que el tosco, huraño y combativo Madar tuviese excesivas simpatías entre la afición, pero parece que sí entre algunos de sus compañeros. O más exactamente, entre los enfrentados a Silva porque éste no les ofrece oportunidades. Uno de los significados es Alfredo, quien, al término del partido de anoche, no se contuvo y dijo públicamente que, ante las carencias atacantes, el equipo necesita a Madar. Interpelado por el asunto en la conferencia de prensa posterior, Silva evitó la polémica, aunque tampoco trató de esquivar el asunto. "Tomé una decisión y asumo la responsabilidad".