La Liga Asobal afronta hoy otro caos bajo la presión del Barcelona

El balonmano español no sale del caos. A pesar de las medallas en el Europeo y en Atlanta, de los triunfos de los clubes en campeonatos continentales y del factor Urdangarín, la Liga Asobal afronta hoy una asamblea con augurios de gran turbulencia. El hegemónico Barcelona, contrario a que la Liga termine con eliminatorias, plantea su retirada por un problema relacionado con los derechos de televisión.

Oficialmente, el Fútbol Club Barcelona argumenta que su acuerdo con TV3 es incompatible con el contrato de Asobal y Canal +. Los intereses del Barça convergen con los de la Federación, cuyo presidente, Jesús López Ricondo, dijo el día 11: "Asobal metió al balonmano en un pozo sin fondo al aceptar los términos de su contrato con Canal + porque Sportmanía no tiene audiencia". López Ricondo ha expresado repetidamente la idea de que TVE es la cadena más adecuada para promover el balonmano.Una semana antes, el presidente se mostró favorable a la reimplantación de la fase final (play off): "Hay que cambiar radicalmente la imagen caótica del balonmano, que ahora es un deporte de moda. Todos los partidos deben disputarse en sábado o domingo. Y los play off producirán una emoción comercialmente rentable", dijo a EL PAÍS. Pero varias informaciones posteriores indican que la Federación ha cambiado de postura. López Ricondo no pudo ser localizado ayer en Valladolid para, explicar la contradicción.

Por otro lado, la Federación intentará retomar el control de la Liga y la Copa del Rey en su próxima asamblea, prevista para el día 28. Si Asobal deja de organizar la Liga, los derechos de Canal + serían cuestionados. Arsenio Pérez, jefe de prensa de Asobal hasta hace unos días, se basó en esa hipótesis para afirmar: "López Ricondo, del Partido Popular, actúa con intereses partidistas en este asunto. Bombardea a Asobal para ceder los derechos a TVE por decreto ley". Pérez fue fulminantemente desautorizado y destituido por Domingo Díaz de Mera, presidente de Asobal, tras una reunión de éste con López Ricondo y Pedro Antonio Martín Marín, secretario de Estado para el Deporte.

El cisma y la guerra entre la Federación y la Liga Asobal coinciden con las tensiones detectadas en la selección de Juan de Dios Román. Varias personas que acudieron al Mundial de Japón aseguran que los laterales Enric Masip y Mateo Garralda, ambos del Barcelona, están en contra del entrenador, lo que explicaría la escasa fluidez del juego por los extremos y la sobrecarga de responsabilidad hacia el central, Talant Duishebáiev. Román lo niega: "Mis relaciones con los jugadores van de buenas a excelentes, en un ambiente de armonía. Ahora trabajaremos para Sidney 2000". Masip ha anunciado que no volverá a la selección "por motivos personales". En una reciente entrevista, Garralda dijo: "Juan de Dios se ha encontrado con un gran plantel de jugadores".