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Almeida y Garrido critican "la política de aislamiento" de Anguita

La presidenta del Partido Democrático Nueva Izquierda, Cristina Almeida, y su secretario general Diego López Garrido, criticar ayer "la política de aislamiento que, en su opinión, practica coordinador general de Izquierda Unida (IU), Julio Anguita, y la calificaron de "marginal". Según ellos, influye "negativamente" en la búsqueda de un punto de partida, como el del acuerdo elector en Galicia con el PSOE, para la unión de la izquierda.En la clausura de la convención Ideas desde la Izquierda, celebrada este fin de semana en Madrid con la participación de un 300 personas, Almeida se refirió las acusaciones de deslealtad que su grupo ha recibido desde el sector duro del PCE. "Vamos a ten momentos difíciles", concluyó en alusión a que la Comisión Ejecutiva Federal de IU va a analizar precisamente hoy en qué medida NI ha vulnerado el documento sobre pluralismo y coherencia interna de la coalición con sus iniciativas, entre ellas los actos públicos en respaldo de la reforma labor pactada por la patronal y los sindicatos. En todo caso, este órgano carece de facultad sancionador por lo que sólo remitirá sus conclusiones al Consejo Político Federal, previsto para el 28 de junio.

Almeida habló de "la quiebra de la convivencia política" y de la necesidad de acabar con "la crispación" tanto en lo relativo a "la parafernalia de arriba", del Gobierno, como a la que se está produciendo "dentro de la izquierda". Así, rechazó el sectarismo y el enfrentamiento -"queremos vivir la política de manera relajada; no estamos para pelearnos con todo el mundo", dijo- y reconoció que el proyecto de IU se ve "en peligro" por culpa de "la incapacidad" para mantener "el diálogo".

"Nuestra política", insistió Almeida, "es la del diálogo y la transformación de la sociedad' Por eso NI apoya "el acuerdo entre los empresarios y los trabajadores" y el obtenido con el PSO con vistas a las elecciones en Galicia, "una comunidad vapuleado por la derecha desde hace mucho años".

"Renovación y apertura"

A su vez, López Garrido reiteró que "la izquierda necesita una re novación y una apertura", razón por la que la convención fue abierta: "No la hemos hecho para venir con el carné en la boca". Se da la circunstancia de que ningún representante de IU, al margen de lo propios militantes en NI, acudió ella y, en cambio, sí lo hicieron socialistas destacados como Joaquín Almunia. "Han venido todos lo que han querido hacerlo", resumió; "los otros, no".Garrido enfatizó que la entente gallega IU-PSOE es "buena" y v a contar "con todo el apoyo" d su formación a pesar de Anguita "que no entiende nada de lo que está pasando". "Vamos a ir a Galicia a que no gane [Manuel] Fraga", afirmó para extender después esa lucha contra José María Aznar: "España tiene todavía un Gobierno de derechas, pero esto va a cambiar con toda rapidez porque está presidido por una persona milagrosa y, realmente, es un milagro que esté allí".

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