Enigma en el museo
300 personas participaron en un juego de pistas y misterios organizado en el Reina Sofía
"Las dianas de ladrillo están al final de la escalera. Junto a la última está el secreto. ¿Cuál es el secreto?". Las niñas se ponen serias y, de repente, una de ellas echa a correr: "¡Hay que ir por aquí!". Los pasillos se llenan de risas y de gritos. Esta escena no ha tenido lugar en el patio de una escuela, sino en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, que organizó ayer un juego de enigmas para festejar el Día Internacional de los Museos.Los años anteriores, ese día coincidía con la inauguración del taller infantil, pero esta vez la meta fue algo diferente. "Queríamos hacer algo que implicara a toda la familia", precisa María Jesús de Domingo, jefa del Servicio Pedagógico del museo. "La idea era que fuera un trabajo de padres e hijos resolver el enigma", añade.El juego de pistas consiste en resolver diez enigmas. Cada respuesta acertada permitía ir encontrando las letras que componen el nombre del personaje misterioso, el enigma, en este caso Miguel Ángel Buonarotti.
"A veces es demasiado difícil para los niños, pero les vamos ayudando un poquito y descubren las soluciones solos", cuenta Soledad, que acudió con unos amigos y con seis niñas.
Encontraron el nombre del personaje en una hora y media. "Yo voy a muchos museos pero, a veces, me aburro un poco", admite Fátima, de ocho años. "Me gusta más cuando hay juegos, porque así me divierto".
Ana y Alicia también están entusiasmadas: "Es más interesante porque así aprendes más y sabes cómo mirar un cuadro. Nos gustaría que se volviese a repetir", dice Ana."Pensábamos que unas 300 personas iban a participar pero, por lo visto, van a ser más", estima José Guirao, el director del Museo. "Si esto funciona tenemos pensado repetirlo de forma permanente, por ejemplo, todos los domingos", añade.
Los participantes que encontraron el nombre del personaje ganarán un pase anual, y cuatro de los que además hayan resuelto los diez enigmas recibirán una serigrafía original.
Los visitantes del Reina Sofía tuvieron también la oportunidad de visitar, ayer, partes del edificio normalmente cerradas al público, como la Sala de Protocolo, y de asistir a un concierto de campanas ofrecido por el artista valenciano Llorenç Barber.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.