La 'nevera' amenaza de nuevo
La labor de Rafael Hernanz Angulo, árbitro del Betis-Atlético de Madrid (3-2) del pasado domingo, está posibilitando la restauración de la nevera (suspensión temporal que no consta oficialmente como sanción). El principal pecado que sus dirigentes atribuyen a este árbitro pontevedrés, abogado de profesión, es la redacción del acta en el capítulo de la expulsión del jugador del Atlético de Madrid Esnáider. Fuentes del Comité de Árbitros han significado que dicha redacción es errónea."Por dar un cabezazo a un jugador contrario, derribándole cuando el balón no estaba en situación de ser jugado", es el motivo textual que expone el árbitro para expulsar a Esnáider. El jugador contrario, el yugoslavo Vidakovic, reconoció en el descanso y al final del partido: "De cabezazo, nada de nada. Vino hacia mí, pero no me dio con la cabeza. Sólo me insultó". Las imágenes de televisión tampoco favorecen el contenido de la redacción del acta, porque no demuestran que exista, cabezazo ni tampoco derribo. Tanto es así que incluso fuentes federativas no descartan que se levante la tarjeta roja mostrada al delantero argentino-hispano del equipo madrileño. Esnáider, de todos modos, no podrá es tapar de la respuesta que dio al árbitro. "No tienes ni puta idea", frase que repitió varias veces a Hernanz Angulo.El árbitro gallego tiene así casi todas las cartas para ser el protagonista del regreso de la nevera arbitral Si se confirmara, las vacaciones de la nevera apenas habrán durado unos meses, los que han transcurridos desde el inicio de la presente temporada. Fueron unas vacaciones forzosas, obligadas por el ordenador que a partir de la actual temporada impuso las designaciones arbítrales, señaladas desde la primera a la última jornada de la Liga. En los datos aportados al ordenador no figuró la nevera.
Los dirigentes arbitrales se han resistido hasta ahora a imponer al ordenador su criterio, a pesar de que algunas actuaciones aconsejaban la resurrección de la nevera. Ahora, tras la actuación de Hernanz Angulo, un árbitro que esta temporada se estrenó en Primera División, la paciencia se ha acabado. El problema que puede plantear el ordenador tiene fácil solución para los dirigentes arbitrales. "¿No hay dos árbitros suplentes por designación? Pues que Hernanz Angulo pase a la nevera", es la sentencia.
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