Taxis y gasolineras aplazan sus protestas

Los taxistas y dueños de gasolineras han decidido aplazar sus protestas a la espera de negociaciones con la Administración.

La Confederación Nacional de Estaciones de Servicio acordó ayer dar un plazo al Gobierno para que rectifique su decisión de considerar consumidores finales de combustible a las cooperativas de transporte, lo que restaría gran parte de su margen de negocio.

El próximo día 28, si no se atiende su demanda, estudiarán convocar "una huelga indefinida y sin servicios mínimos", que en realidad sería un cierre patronal, ilegal.

Roberto Sáenz, presidente de la confederación de gasolineras, anunció asimismo que, con carácter urgente, se dirigirán al Ministerio de Trabajo para que los despidos, que según su versión pueden afectar a 10.000 empleados, se tramiten como regulación colectiva de empleo y_no como rescisiones de contrato individuales.

La Confederación del Taxi de España decidió también detener las movilizaciones, a la espera del resultado de las negociaciones con Fomento. Esta asociación se reunirá hoy con el director, general de Ferrocarriles y Transporte por Carretera, Fernando Cascales, para exponer sus peticiones.

Los taxistas piden la jubilación a los 60 años si se ha cotizado durante 35 al menos (20 de ellos en el sector del transporte) y el reconocimiento de enfermedades profesionales. También quieren una reducción del precio del carburante.