El Ajax no quiere más sorpresas

El Ajax no quiere más sorpresas. Todavía le queda el gusto amargo de la salida a finales de la temporada pasada por la puerta de atrás, casi sin avisar, de jugadores clave como Kanu, Reiziger, Davis y Finidi, cuyas ausencias han dejado al equipo de Amsterdam bien tocado. Así que para evitarse nuevos disgustos inesperados, el club ha pedido a los cinco jugadores con contrato hasta finales de esta temporada que comuniquen antes de mediados de mes si tienen intenciones de quedarse a vivir en Amsterdam. A parte de interesarse por el futuro de Martijn Reuser, Arnold Scholten y el capitán del equipo Danny Blind -con sus 35 años todo hace suponer que se va a retirar- el Ajax quiere tener seguridad sobre Winston Bogarde y fundamentalmente sobre la joven estrella del equipo Patrick Kluivert, del que se dice que tiene un precontrato con el Milan.Para curarse en salud, el club ha comenzado ya las conversaciones con estos dos últimos y ha dejado caer que este año no va a haber problemas de dinero. Al parecer el Ajax, que no se caracteriza por pagar salarios desorbitados, ha hecho ya una atractiva oferta a Bogarde y está dispuesto a tirar la casa por la ventana con Kluivert para asegurarse su permanencia en Holanda.

El Ajax, que tras perder su liderazgo en las competiciones nacionales e internacionales enfrenta un futuro muy incierto, trata de convertirse en un club atractivo desde un punto de vista financiero algo que hasta ahora no han logrado. Además de las huídas del pasado año, esta temporada han llegado jugadores de tan solo mediana calidad como los argentinos Gabrich o Juan que no han alogrado devolverle al Ajax lo que perdió.

El futuro del club, sin embargo, está oscurecido por todo tipo de dudas económicas. La sentencia del caso Bosman le ha afectado más que a otros equipos europeos. "De un solo golpe nos hemos quedado sin los ingresos de las transferencias y la venta de jugadores ha sido la principal dependencia del Ajax durante años", ha reconocido el tesorero Arie van Os. Aunque el nuevo y ultramoderno estadio con 51 plazas ha contribuido a aumentar sus ingresos, la respuesta de los socios con un comportamiento tan deficiente en esta temporada -el Ajax está el sexto en la tabla- no se puede augurar.

Los abonos corren el riesgo de verse disminuidos de forma drástica como ha reconocido Van Os y la pérdida de ingresos si el equipo no consigue incluirse en la próxima edición de la Liga de Campeones puede darle la puntilla final.

La marcha anunciada del entrenador Louis van Gaal y la negativa de Johan Cruyff, el principal candidato a sustituirlo, no contribuyen a clarificar las perspectivas del club en el banquillo. Ni siquiera hay certeza sobre el nombre del estadio después de que en días pasados un juez de Amsterdam haya dado al club dos meses para buscarle un nuevo nombre. El Arena, estrenado en el mes de agosto, estaba ya registrado.