Graf precisa de cinco mangas para vencer a Martina Hingis
La alemana conquista su quinto título en el Madison Square Garden
Nada parece poder frenar a Steffi Graf. Tiene 27 años, una lesión crónica en la espalda y ha sido operada en un pie esta temporada. Su padre acaba de salir de la prisión de Mannheim, con un juicio en curso por evasión de impuestos. Y tiene unas ganas locas de ir a abrazarle en casa, según ella misma ha confesado. Pero nada de todo eso le ha impedido cerrar una de las mejores temporadas de su vida profesional con un triunfo en el Madison Square Garden de Nueva York.Graf ha sido el único resorte de la vieja guardia que ha encontrado defensas al ataque furibundo de la nueva generación. Ayer, la número uno del mundo superó a Martina Hingis, de 16 años, en la final del Masters. Pero precisó de cinco mangas para anotarse su quinto título de maestra, tras haberlo conseguido en 1987, 1989, 1993 y 1995. La alemana ganó por 6-3, 4-6, 6-0, 4-6, 6-0. Su triunfo redondeó los títulos conseguidos este año en Roland Garros, Wimbledon y el Open de Estados Unidos. Y ratificó su posición indiscutible de líder de la clasificación mundial.
Hingis, sin embargo, también encontró aspectos positivos a su derrota. Demostró una capacidad tenística y un espíritu de lucha muy superior al de otras jugadoras y llevó a Graf a sus límites. Ésta fue la tercera vez en la historia del Masters femenino en que una final se decide en cinco mangas: el año pasado, Graf venció a Huber, y en 1990 Monica Seles a Gabriela Sabatini.
"Ha sido un partido muy difícil, Hingis llegó a todas las bolas y creo que en determinados momentos no tuve el control suficiente para conseguir los puntos que me hubiesen permitido ganar el partido antes del quinto set", declaró Graf. Y añadió que había sido un gran triunfo y que lo dedicaba a su padre. Peter Graf fue liberado la semana pasada, tras haber permanecido en la cárcel desde agosto de 1985.
Acusó el esfuerzo
Hingis acusó el esfuerzo realizado y no pudo impedir que por dos veces Graf se anotara sendas mangas por 6-0. La alemana, consciente de su superioridad física, intentó alargar los puntos y movió constantemente a Hingis mandándole bolas a ambos lados de la pista. En el cuarto set la joven jugadora suiza comenzó a tener calambres en la pierna izquierda. Dispuso de una ventaja de 5-1, pero contempló cómo Graf, con un fuerza mental y física de hierro, lograba colocarse con 4-5 y tenía incluso cuatro bolas para empatar la manga. Ahí Hingis dejó constancia de su impresionante pundonor. Acabó ganando el set y empató el partido a dos mangas.En la última, Graf contrastó su condición de número uno y supo aprovechar a la perfección el agotamiento físico en que se encontraba su rival. Dos horas y 48 minutos es un tiempo inusual para un partido femenino. Y Hingis lo acusó. La derecha y el revés cortado fueron las mejores armas de Graf. Pero en esta ocasión contó también con el apoyo de un servicio que le permitió anotarse 11 aces.
El triunfo de Graf la dejó con una marca de 5-1 en los enfrentamientos que ambas jugadoras han tenido como profesionales, cuatro este año. Graf ingresó por su triunfo unos 62,5 millones de pesetas y sumó su título 131 como profesional. Sus ganancias de la temporada ascienden a 333 millones de pesetas.
Hingis percibió 31 millones de pesetas y se convirtió en la segunda finalista del Masters más joven en la historia y en la primera en haber superado a su edad el millón de dólares en premios.
Por otra parte, Arantxa Sánchez y Jana Novotna se despidieron como pareja perdiendo la final de dobles ante las norteamericanas Mary Joe Fernández y Lindsay Davenport por 6-3, 6-2.
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