CAVERNA DEL DESAMOR
Un iraní del que sólo se sabe su nombre, Darab, lleva viviendo en una cueva en una zona perdida desde que su mujer abandonó hace 30 años.El hombre, de unos 50 años, había perdido prácticamente la capacidad de hablar, pero pudo explicar a los asistentes sociales que le descubrieron las razones de su exilio. Conducido a una clínica, se escapó para volver a su cueva, por lo que las autoridades han decidido aportarle allí lo necesario para su supervivencia.-
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