"Sólo con la camiseta no se puede ganar"

Fabio Capello desenterró ayer el hacha por primera vez. El técnico italiano se mostró más crítico que nunca desde su llegada al Madrid. "Es la primera vez que mi equipo no me ha gustado", dijo tajantamente, antes de matizar que "sólo con la camiseta del Madrid no se ganan los partidos". Serio y circunspecto por el pésimo partido dibujado por su equipo, Capello reconoció la "incapacidad" del Madrid "para salir con el balón jugado desde la defensa". "Parecía un partido de tenis", afirmó el ex entrenador del Milan, que ayer insistió en apostar por Sanchis en la zona de creación, en perjuicio de Redondo, más inclinado hacia la izquierda.Capello atribuyó la mala tarde a la ausencia de los internacionales durante la semana, un hecho que, en su opinión, "motivó que el equipo jugara de forma muy lenta". De la criba, Capello salvó a Redondo, que ayer debutó como español en la Liga. "Le falta ritmo y aún no puede jugar un partido completo, pero ha estado bien", subrayó el técnico.

Capello tachó de "justo" el resultado y apostilló: "No podemos regalar goles como el primero que ha marcado el Racing". Fue una gran jugada de Bestchastnykh, que aprovechó la vocación ofensiva de Roberto Carlos para cogerle por la espalda y fusilar a Illigner. Pese a la valoración de Capello, Redondo no se mostró demasiado feliz con su reaparición a causa del mal partido del Madrid. Personalmente, se mostró confiado en "recuperar cuanto antes" su forma ideal.

Hubo quien encontró ciertos argumentos para justificar el pobre encuentro madridista. Fue el caso de Mijatovic, que lamentó "la excesiva dureza de los defensas racinguistas". Para Lorenzo, Sanz, "lo importante es que el equipo sigue invicto". El presidente ensalzó "la capacidad de pelea" de sus jugadores, "capaces de remontar por dos veces un resultado adverso".

Sánz también corroboró las palabras de Mijatovic. Incluso, fue más allá: "Si ayer (por el sábado) Ronaldo llega a sufrir un marcaje semejante al que ha sufrido Mijatovic, el brasileño seguramente no hubiera marcado dos goles".

A Sanz la segunda parte le pareció intensa y lanzó un apoyo al arbitraje, cuya labor recibió muchas críticas del bando local. "Hay que ayudar a los árbitros, dada la dificultad de su labor", comentó.

Marcos Alonso, el entrenador cántabro, lamentó el resultado y expresó que su equipo había hecho más méritos para, lograr la victoria. "Los árbitros unas veces te dan y otras te quitan, lo importante es que al final de temporada los errores y aciertos estén compensados

El cambio de Sanchis

Sanchis acabó el partido lesionado, con un estiramiento muscular, y protagonizó uno de los incidentes más confusos que generó la tarde. Precisamente por esas molestias musculares, el central madridista se tiró más de cinco minutos pidiendo, al grito de "me quiero cambiar", su sustitución. Se lo decía a Capello. Nada. Se lo decía al médico. Nada. Se lo decía a Chendo, su compañero. Nada. Se lo volvía a decir a Capello. Que no, que aguantara, que ya no estaba Redondo en el campo. Al final, ante sus insistencia, de tanto repetir que no podía seguir, Sanchis consiguió que Chendo le supliera.