DIETAS POR RESPIRAR

El semanario político más prestigioso de Austria, Profil, publica esta semana un reportaje que demuestra que los diputados de ese país pueden cobrar dietas hasta por caminar. Ilustra la portada de la revista la ex secretaria de Estado para la Unión Europea, la socialdemócrata Brigitte Ederer, que, según Profil, pudo haber cobrado hace un año por una peregrinación a un santuario mariano que realizó después de ganar una apuesta sobre si Austria entraría en la Unión Europea, como así se decidió finalmente tras la celebración de un referéndum. Y es que, de acuerdo con una reglamentación del año 1955, los parlamentarios pueden cobrar dietas por tener que caminar más de seis kilómetros, por tener que salvar una diferencia de altitud de terreno o por llevar su propio equipaje. Por viaje, el reglamento entiende todo aquel desplazamiento de más de dos kilómetros. Incluso los viajes en bicicleta, caballo o burro, dice el semanario, pueden ser subvencionados por los presupuestos públicos, eso sí, siempre que se presente la factura. Además, para que no falte de nada, los sufridos hosteleros austriacos están obligados a velar por la correcta hidratación de los padres de la patria: la ley prevé que los diputados deben tomar un "agua de irreprochable calidad", por lo que tendrán derecho a exigirla "gratuitamente en las instalaciones hosteleras austriacas"-