Los más ricos del universo

Son los más ricos de entre los ricos, los 400 Principales del dinero internacional, según la revista Forbes, que` cada año desde 1986 publica la lista de los multimillonarios del mundo. En cabeza, por segundo año consecutivo, dos estadounidenses, Bill Gates, presidente de Microsoft, y el financiero Warren Buffett. Estados Unidos sigue siendo la cuna de una tercera parte de los acaudalados del planeta, pero Asia empuja fuerte y coloca a cinco personas entre las diez más ricas.Entre los 447 individuos o familias que tienen más de 1.000 millones de dólares (128.000 millones de pesetas), el umbral mínimo para pertenecer al olimpo de la riqueza, hay tres nombres españoles: Emilio Botín y familia, con 2.000 millones de dólares; la familia March, con 1.100 millones, y las hermanas Koplowiiz, con 1.000 millones. Ninguno tiene puesto adjudicado, porque la lista sólo clasifica a los 100 primeros, aquellos que controlan más de 3.000 millones de dólares.

Forbes, una de las biblias del capitalismo, tiene el exquisito cuidado de no incluir en su lista ni a las familias reales o jefes de Estado, "porque su riqueza viene más de la herencia política que del esfuerzo económico", ni a los dictadores, "porque su riqueza se basa en la represión de Estados policiacos, no- en la habilidad económica".

A sus 40 años, Bill Gates es dueño de la primera empresa informática del mundo, Microsoft. Gracias a que las acciones de la compañía subieron un 40% durante el año 1995, su fortuna se valora en 18.000 millones de dólares (unos 2,3 billones de pesetas), pero no parece que el dinero se le haya subido a la cabeza: Bill Gates sigue trabajando jornadas interminables y piensa que la lista de los 400 de Forbes "es una estupidez".

Warren Buffett tiene 66 años y, en contraste con Gates, se confiesa un analfabeto informático. A cambio, se maneja como nadie en los mercados de valores. Posee serias participaciones en Berkshire -su principal fuente de ganancias en 1995 Disney/ABC y Coca-Cola. También en Gillette, lo cual le permite decir: "Es un placer irse a la cama cada noche sabiendo que hay 2.500 millones de hombres en todo el mundo que tienen que afeitarse por la mañana". Europa coloca al suizo Paul Sacher en el bronce de la fortuna. A pesar de que ya no controla el día a día del gigante farmacéutico Roche, Sacher maneja unos recursos familiares que superan los 13.000 millones de dólares. Hong Kong, a un año de modificar su estatus colonial, tiene a dos representantes de trayectoria paralela entre los diez grandes: el magnate inmobiliario Lee Shau Kee (4), con ambiciosos proyectos para lanzarse al mercado chino, y Li Ka-shing (6), que también amasó una fortuna con la propiedad inmobiliaria y que ahora invierte en puertos, centrales energéticas e infraestructuras en China. Entre los dos chinos de Hong Kong se coloca otro chino, Tsai Wan-lin, de Taiwan, líder en servicios financieros y en seguros de vida.

En séptimo lugar se encuentra el destronado Yoshiaki Tsutsumi, un japonés que era el hombre más rico del mundo hace algunos años, pero al que la crisis del mercado inmobiliarío en su país le ha dejado con la ridícula cantidad de 9.200 millones de dólares. Hay después otro estadounidense, Paul Allen, amigo de Gates en Microsoft y el más moderno de los diez: toca la guitarra en una banda de rock, ha organizado un centro de música alternativa, es dueño del equipo de' baloncesto Trail Blazers y se relaja encestando canastas de tres puntos en su cancha privada. Luchó y venció a la enfermedad de Hodgkin y ha invertido en Ticketrnaster -número uno en reservas telefónicas de entradas para espectáculos- y en el DreamWorks, el nuevo estudio de Hollywood, con Steven Spielberg, David Geffen y Jeffrey Katzenberg.

En la lista de la revista Forbes se ve que el puñado de multimillonarios crece: en 1991 ha bía 274 por encima de los 1.000 millones de dólares, y ahora hay 447. Los cresos del mundo si guen concentrándose en buena medida en EE UU, que pasa de 96 a 149 fortunas. Japón tiene el mismo número de potentados (41) que el año anterior, pero en el resto de Asia se salta de 27 a 82 superricos. Europa mantiene el tipo en la clasificación -ha pasado de 81 a 110 magnates en los últimos cinco años, de los que casi la mitad. son alemanes y 14 son franceses- y Latino américa pasa de 8 a 39 millonarios, de los cuales hay 15 en México y 10 en Brasil.