"A Madrid le sobra histeria y contaminación"

, Anda sumida en un frenético romance de amor y odio con el cine. Desde que comenzó a rodar Tierra, se vio metida en una jaula de oro, de la que escapaba sólo para ser otra ante la cámara, hasta que voló rumbo a un país lejano. Pasota y algo chicazo en Hola, ¿estás sola?; princesa de gasolinera en Tengo una casa, y lolita erótica hasta la ninfomanía en Tierra, a punto de estrenarse. No ha tenido siquiera que escoger. Ha sido el propio azar el mejor agente de tres personajes que buscaban una actriz. Educada en un colegio de monjas, "conservador y bastante pijo", de pequeña jugaba a ser actriz, pero su familia consiguió persuadirla, sólo por un tiempo. Nació en Madrid, y se llama, efectivamente, Silke, nombre sin traducción posible que le suena rápido y neutro. Es ágil, espigada, amable y atractiva. Falsamente sosegada. De gramática comodona y callejera, propia de sus 22 años, escucha atenta y responde con una voz áspera, que sería displicente si no fuera por lo mucho que sonríe.Pregunta. Tres películas en un año, ¿sabe lo que se le viene encima?

Respuesta. No me lo recuerde, no quiero ni pensarlo. ¿Cómo lo llevo?, pues francamente mal. Puede que una actriz tenga que estar preparada para los agobios de las promociones, pero esto me supera. Me felicitan, y yo me pregunto por qué se alegran tanto. Esto no es lo mejor que me ha pasado en la vida. '

P. Pero usted quería ser actriz.

R. Sí, pero ha supuesto un cambio demasiado grande en mi vida. te ves formando parte de un juego que no controlas nada. He tenido rachas tan desorientadas que llegué a, pensar que me había equivocado. Me encanta lo mejor que tiene el cine, y odio su peor parte. Tengo pánico a la fama, pero lo combatiré con mi condición de aventurera.

P. Pasó tres meses en Asia, ¿qué añoraba?

R. Nada. Yo suelo estar a lo que estoy. Disfruto del momento sin pensar en lo que me falta. Madrid no me gusta demasiado.

P. ¿Sólo vive aquí por el trabajo?

R. Aquí tengo a mi familia, mis amigos, pero me cuesta dar con las cosas positivas de esta ciudad. Le sobra histeria y contaminación, y lo peor es que la tensión de Madrid es contagiosa.

P. ¿Su ciudad ideal?

R. Con la amplitud de jardines de París, el clima y el buen rollo de Madrid, la mentalidad y la música de Londres, mucha gente guay, y sobre todo mezcla de razas. La suave velocidad de Amsterdam y las casas todas de colorines.

P. ¿Vive las ciudades donde acude a rodar?

R. La diferencia entre rodar en Madrid o hacerlo fuera es abismal. Cuando trabajo en un lugar al que me siento emocionalmente unida, me disperso. Prefiero rodar fuera.