Zülle se recrea en su monólogo

No hubo reparto ni actores secundarios. El suizo Álex Zülle se arrogó por completo el papel estelar de la Setmana Catalana de ciclismo, que concluyó ayer, con una nueva exhibición en la contrarreloj de 11 kilómetros disputada en Montjuïc. Zülle relegó a todos sus rivales a una distancia tan grande en las dos etapas decisivas, la del pasado miércoles en Pal y la de ayer en Barcelona, que no dio lugar a la menor de las conjeturas respecto a quién iba a ser el ganador de la carrera. El jefe de filas del ONCE, además, estuvo muy bien respaldado. en todo momento por un bloque muy compacto en el que destacó especialmente la figura del joven Iñigo Cuesta, que además de colaborar de forma encomiable con Zülle en las etapas precedentes, realizó ayer una excelente contrarreloj que le permitió superar al italiano Francesco Fratini (Gewiss) y acabar segundo en la general.Miguel Induráin (Banesto) no forzó en la contrarreloj de ayer y con una bicicleta tradicional perdió casi dos minutos y medio respecto a Zülle. Abraham Olano (Mapei) sí estuvo entre los destacados y fue séptimo a 52 segundos del ganador suizo.

Por la mañana se disputó un primer sector entre Vic y 5ant Cugat que ganó el italiano Stefano Zanini (Gewiss). Curiosamente, todos los ganadores de las etapas y de la general han sido corredores cuyo apellido empieza por zeta: Zülle, Zabel y Zanini.

El director del grupo que viste de amarillo, Manolo Sainz, hizo balance y desveló una ambición máxima en la presente temporada: "Con Jalabert lesionado, no tenemos un equipo como para aspirar a grandes cosas en las clásicas. Ahora vamos a por el Tour.

A diferencia del año pasado y tal como veo que está andando el equipo, esta vez lo vamos a afrontar con más mentalidad y mayor confianza". Olano y Cuesta pasaron un control antidopaje por sorpresa, al margen de los propios de cada carrera, que forma parte de un plan establecido para controlar a los corredores que serán olímpicos en Atlanta 96.