Serra: "La derecha no se centra con un congreso de tres días"

Narcís Serra, cabeza de lista del PSC en Barcelona, es consciente de que el socialismo afronta las elecciones más difíciles desde la recuperación de la democracia. Serra manifestó ayer a este diario que sin el desgaste y los errores socialistas, José María Aznar " no sería alternativa". "Aznar no da la talla para aspirar a la presidencia del Gobierno español", opina.Uno de los lemas recurrentes de la campaña socialista es apelar al miedo de la derecha. Serra considera que no se trata de una estrategia inventada. "No es un cuento, porque tenemos una derecha con tics de autoritarismo, dura en lo económico, escéptica en lo europeo e insensible a la realidad plurinacional de España. La derecha no se centra con un congreso de tres días a 100 millones de pesetas. Para lograr un proyecto de alcance mayoritario, los socialistas necesitamos dos congresos y una dimisión de Felipe González de por medio. Que no nos vengan ahora los del PP, practicantes de la crispación, pregonando que con un congreso de show y azafatas se han situado en el centro".

Serra admite que el PSOE otorgó confianza a gente que no se la merecía y que no supo explicar su gestión. El candidato asegura: "Un factor concreto que dificultó mucho el diálogo entre el Gobierno y los agentes,sociales fue la difícil relación con UGT y también con CC OO. Pero en la última legislatura, las relaciones han mejorado mucho. No fue fácil para el socialismo digerir la autonomía recíproca entre el sindicato y el partido. Pero al final la hemos digerido".

Serra encara la campaña con el alivio de una sentencia favorable sobre el caso Cesid y reclama que rectifiquen quienes lo acusaron. "Sabía que el Cesid había actuado dentro de la ley y que estábamos ante unos actos supuestamente delictivos de uno de sus miembros, el coronel Perote, a quien ni conozco ni designé nunca; unos actos que algunos aprovecharon para montar una campaña de difamación. Yo dimití para desactivar la campaña y para demostrar que los socialistas tenemos dignidad política y no nos agarramos al sillón. Ahora los jueces han reconocido que el Cesid actuó dentro de la ley. Y aún está p9r llegar el día en que Francisco Alvarez Cascos rectifique o pida excusas por lo que dijo entonces. Cascos llegó a afirmar que Perote estaba rindiendo un gran servicio al Estado, que el Gobierno usaba al coronel como chivo expiatorio y que el Cesid era un grupo mafioso. Si no hay rectificación, ni Cascos ni el propio Aznar merecen gobernar este país. Ninguno de ellos dudó en debilitar al Estado con tal de atacar al Gobierno socialista".