La Federación Internacional sanciona por un año a Toyota, el nuevo equipo de Sainz
La Federación Internacional del Automóvil (FIA) tomó ayer en París una decisión grave e inesperada que puede afectar al bicampeón mundial Carlos Sainz. La FIA sancionó al equipo Toyota Team Europe, (TTE), que gestiona la participación de los coches japoneses en el Mundial de rallies, con un año de suspensión y la pérdida de todos los puntos obtenidos esta temporada 1995. La escuadra dirigida por el ex piloto sueco Ove Andersson, y en la que debe militar Sainz el próximo año, fue castigada por manipular el turbo de sus coches en el Rally de Cataluña.
"Es una sanción totalmente desproporcionada, no nos la esperábamos", reconoció anoche a este diario la portavoz del equipo TTE, Marion Bell Andersson, esposa del patrón. "Estábamos dispuestos a aceptar un castigo por la irregularidad cometida. Asumimos nuestro error, aunque ni Ove ni los pilotos lo conocían, pero esto es excesivo. Da la impresión de que hay alguna gente interesada en hacer daño a los rallies", añadió. "Ahora tenemos siete días para apelar contra la sanción y, desde luego, vamos a hacerlo". Nadie de la escudería sin embargo, negó la realidad de la infracción, ya que la manipulación de los coches de Didier Auriol y Juha Kankkunen descubierta en el Rally Cataluña fue flagrante. El propio Ove Andersson la admitió tanto en aquel momento, el pasado 25 de octubre, cuando supuso la descalificación de Auriol tras ser cuarto, como ayer cuando fue escuchado por el Consejo Mundial del Deporte del Automóvil, máximo órgano de la FIA en materia competitiva.
Sorpresa e indignación
De no prosperar el recurso, el TTE no podrá competir en el Mundial de 1996, aunque Toyota sí podría confiar sus intereses en esta especialidad a otra estructura que no tuviera nada que ver con esta escudería. El comunicado oficial emitido ayer por la FIA exculpaba a la marca japonesa y señalaba explícitamente a los responsables del equipo alemán que prepara los coches en Colonia: "La sociedad Toyota Motor Corporation no ha comparecido porque no le concernía. No hay nada que permita suponer que nadie fuera del equipo pudiera estar al corriente de la infracción".El conflicto toca de lleno a Carlos Sainz, que anunció el pasado lunes su contrato con el TTE para las tres próximas campañas. El piloto español mostró ayer su sorpresa y su indignación. "Hay que parar a esta gente", dijo, refiriéndose a los responsables de la FIA. "Esto no puede ser. Si al final se confirma esta sanción, quizá lo que hay que hacer es apartar a la federación de los rallies y ponerlos en manos de pesonas a las que realmente les interese".
Sainz , como la mayoría de gente del mundillo de los rallies, coincidió en que la medida es exagerada. Algunos anuncian ya intereses ocultos tras la sanción a Toyota. Hay incluso quien quiere ver una maniobra de Bernie Ecclestone, vicepresidente de la FIA y alma mater de la fórmula-1, que querría atraer al poderoso fabricante japonés hacia esta competición y reducir la competencia que le hacen los rallies.
Juanjo Lacalle, el representante de Sainz, fue contundente. "Se quieren cargar los rallies", dijo. "Esto es desmesurado. En la F-1 se han descubierto trampas y nadie ha recibido un castigo tan fuerte. No existe precedente". El año pasado, la FIA fue menos severa con el equipo Benetton y su piloto Michael Schumacher. Y en anteriores irrregularidades cometidas en los rallies, nadie recuerda una sanción tan ejemplar.
En 1993, en San Remo, Lancia utilizó gasolina ilegal. Cuando se verificó, semanas más tarde, sus coches, entre ellos el de Sainz, fueron excluidos de la clasificación final. También en 1993, Didier Auriol fue excluido en Suecia por realizar asistencia en una zona donde no estaba permitida. Y el caso más semejante al actual ocurrió en 1981, cuando en los Audi Quattro se utilizó un sistema de refrigeración colocado en el lugar de los faros. Sólo fueron eliminados de aquella carrera.
La trampa en el turbo de los Toyota Celica del TTE fue descubierta al término del Rally Cataluña. Nadie sabe si ya había sido utilizada anteriormente. Un bombero de Girona, integrante del grupo de comisarios que verificaba los coches, detectó el sistema especial que anulaba el efecto de la brida restrictora del turbo, cuyo diámetro reglamentario es de 34 milímetros. El ingenio, apenas perceptible cuando el coche estaba en reposo, permitía la entrada de más aire en el turbo y, como consecuencia, una mayor potencia.
"Es el sistema más ingenioso y avanzado que he visto en 30 años", declaró el presidente de la FIA, el británico Max Mosley, después de dar a conocer las sanciones, decididas por unanimidad por los 19 miembros del Consejo Mundial presentes en las deliberaciones. Mosley añadió: "Nos han dicho que la decisión se tomó a un nivel determinado del equipo, que la dirección no la conocía. Pero todos tienen que asumir sus responsabilidades". Hasta ahora, sólo ha dimitido el ingeniero Dieter Bulling, director técnico de la escudería.
Consecuencias futuras
Las consecuencias futuras de este conflicto dependerán de la decisión final tras la apelación que el TTE presentará en los próximos días. Sainz, por tanto, aún deberá esperar antes de conocer que futuro le aguarda el año que viene. Sin embargo, ya es seguro que los Toyota oficiales no correrán el RAC Rally de Inglaterra, última prueba de la temporada, del 19 al 22 de noviembre, aunque sus pilotos sí podrán hacerlo a título individual o en otros equipos.Por otra parte, la influencia de este asunto en la resolución de la presente edición del Campeonato del Mundo será nula. Tanto Toyota como sus pilotos, Juha Kankkunen, Didier Auriol y Armin Schwarz, han Sido desposeídos de los puntos acumulados esta temporada en el campeonato de marcas y en el de pilotos, pero las respectivas clasificaciones no varían. En el Mundial de constructores, Mitsubishi mantiene el liderato con 288 puntos, dos más que Subaru. Y en el de pilotos, Carlos Sainz y Colin McRae conservan intactas sus puntuaciones: ambos tienen 70 puntos y se jugarán el título en el RAC. El que acabe delante del otro será campeón del mundo.
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