CREMA Y CASTIGO

GENTEContra los "brechto-freudianos y los pedantes de todo pelaje" se ha creado una "internacionalpastelera" que ataca a tartazos, es decir, lanzando tartas de crema a la cara de la gente que más lo merece. Noel Godin acaba de publicar un libro, Créme et chatiment! (Crema y castigo), en el que hace inventario de 20 años dedicados a "entartar" a todos los "preciosos ridículos" que ha podido alcanzar con sus dulces proyectiles. El cineasta Marco Ferreri, la escritora Marguerite Duras, la estrella para adolescentes Hélene Rofies, el Papa de la nouvelle vague Jean-Luc Godard, el académico Alain Decaux, el bailarín y coreógrafo Mauríce Béjart .y, sobre todo, el filósofo y novelista Bernard-Henri Lévy han recibido en su rostro las tartas de una "internacional pastelera" que se quiere "anarco-situacionista". Godin es un hombre de principios en su técnica "un abuelo es quien debe entartar a Reagan cuando a éste lo lleven en camilla, un niño tiene que hacer lo mismo con el bebé cantante Jordy, etcétera "- y en la elección de su objetivos: "Ningún farsante como Bernard-Henri Lévy, que se atreve a dar lecciones de valentía política cuando tan sólo es una veleta cobarde que postula para ser el nuevo Malraux". El libro incluye recetas de cocina -de pastelería, obviamente-, un montón de frases y máximas anarquistas, un elogio del cine mudo y respeto por uno sólo de los "entartados", Godard, que, según Godin, "es el único que supo aceptar con elegancia la crema en la cara y en la camisa y supo darle la vuelta a la situación". De momento Godin se limita a actuar, en Francia, y Bélgica, pero su recién creada internacional le puede llevar a cruzar fronteras. Por ahora no la ha emprendido contra el pelotón del Tour, aunque se lo merecen, porque son peores los locutores que lo retransmiten, pero, en conjunto, según afirma; el mundo del deporte está poblado de gente tan infecta como el de la política, el espectáculo o la religión". El día en que Godin oiga una de nuestra célebres tertulias radiofónicas españolas, las tintorerías ya pueden ir pensando en ampliar el negocio-