Bubka y Lewis, ante su juicio final
Las estrellas que dominaron la década de los 80 se enfrentan en Gotemburgo al envite de la nueva generación
La cita entre los mejores atletas del mundo llega de nuevo esta semana. Es en Gotemburgo (Suecia) y allí se van a saldar numerosas cuentas. ¿Será la despedida d Lewis en la alta competición? ¿Pesbancará Brits, un surafricano que irrumpe con fuerza, a Bubka? ¿Qué corredores blancos serán capaces de hacer frente a los atletas africanos?Por primera vez el programa de los Mundiales se va a desarrollar durante nueve días consecutivos, más uno, el próximo viernes, que servirá de apertura con la celebración de una espectacular ceremonia inaugural. Los Mundiales de atletismo quieren hacer honor al tercer lugar que ocupan en la clasificación de las grandes competiciones, después de los Juegos Olímpicos y el Campeonato Mundial de Fútbol, y ha prolongado su programa, ayudado por la propia masificación del evento, en el que participan unos 1.700 atletas de casi 200 países.
En estos Mundiales aún no es oficial que ningún atleta vaya a recibir por parte de la Federación Internacional recompensa alguna reivindicación que será satisfecha a partir de 1997-, pero no obstante, los títulos servirán para aumentar la cotización en las reuniones que, en las dos semanas siguientes, se celebrarán en Europa a forma de revanchas, entre elIas, tres de las cuatro que forman la Golden Four (Zúrich, el 16 de agosto, Bruselas el 25 de agosto y Berlín el 1 de septiembre).
El récord, marginal
En los campeonatos la marca acaba siendo marginal y lo único importante es la victoria. El récord sólo es posible en las carreras de velocidad, donde irremediablemente hay que competir al máximo de posibilidades para no verse sorprendido por los rivales, y en los saltos, siempre que se dé un duelo de tal calibre que conduzca a los atletas al límite de sus condiciones, como sucedió en Tokio-91, con Powell y Lewis por encima de la mítica plusmarca de 8,90 de Bob Beamon.
En 100, 200 y 400 metros vallas, tanto lisos como con vallas, así como en relevos, la obtención de récords mundiales no es un hecho extraordinario. Actualmente, media docena de los vigentes proceden de campeonatos y algunos, concretamente, de los últimos Mundiales disputados en Stuttfart-93. En los de Gotemburgo-95 el llamado a protagonizarlos parece ser Michael Johnson, un extraordinario corredor de 200 y 400 metros, que permanece a 7 y 36 centésimas de ambas plusmarcas, respectivamente. Pero más importante que los récords será conocer, por ejemplo, el estado real de forma de Carl Lewis, cuya máxima ilusión es competir en los Juegos Olímpicos de Atlanta 96, doce años después de conquistar en Los Ángeles cuatro medallas de oro. Lewis; tras ser sexto en las pruebas de selección de 100 metros para los Mundiales, lo que no le valió ni para entrar en el equipo de relevos, tuvo que poner precipitadamente fin a su gira europea, dados los resultados adversos que conseguía. Regresó a Estados Unidos y se centró en la longitud, única prueba en la que competirá en Gotemburgo.
Lewis tiene como reto seguir subiendo al podio de los Mundiales, algo que sólo han conseguido en todas las ediciones Sergei Bubka, Merlene Ottey y Heike Dreschler. Curiosamente, Lewis parece tener más difícil el suma y sigue que el resto de los otros tres grandes atletas, que están en condiciones de seguir haciendo historia. Lewis sólo saltará longitud y ahora mismo parece inferior a Powell y sobre todo al cubano Iván Pedroso, llamado a ser el sucesor de ambos y que el sábado lo demostró al batir en Sestriere (localidad alpina italiana) el récord del mundo, con un salto de 8,96 metros. Bubka, aun en el supuesto de que pudiera ser derrotado por Okkert Brits, que ya supera con facilidad los 5,90 metros, siempre tendría un lugar en el podio, así como Merlene Ottey, siempre presente en los 100 metros, los 200 y el relevo. Heike Dreschler también jugará a dos bandas, con su especialidad de siempre, la longitud, y una nueva prueba, el heptatlón.
Los 100 metros tienen que coronar aun nuevo campeón, o bien confirmar a Lindford Christie como el más grande, aún en su peor año, tal es así que le ha llevado a anunciar su retirada. Los canadienses Surin y Baileys, delfines de, Ben Johnson, se muestran como los más veloces esta temporada, pero luego fallan en los enfrentamientos directos con Christie y los velocistas estadounidenses.
En las carreras de resistencia, Kenia se dispone a desembarcar en Gotemburgo con su armada invencible. El equipo lo forman 33 atletas capacitados para ganar medallas en todas las distancias que vayan desde los 800 metros hasta el maratón (42,195 kilómetros) e incluso copar el podio en algunas especialidades, como los 3.000 metros obstáculos, donde nueve kenianos figuran en las nueve primeras posiciones de la clasificación mundial de todos los tiempos.
El poderío africano en estas pruebas se reafirma con la presencia de los corredores marroquíes y argelinos, de los que, Morceli se muestra como un auténtico portento. Mientras todos sus rivales no ven manera de correr los 1.500 metros en menos de 3.30 minutos, que era la frontera marcada en los tiempos de Coe y Auita, Morceli se permite el estar hasta tres segundos por debajo de esa franja en cuantas carreras participa. El resultado es que saca 50 metros de ventaja a cuantos osan competir con él.
No está confirmado que vaya a correr 1.500 metros en los Mundiales, pues podría salir en 5.000, como hacía Auita. Morceli quiere acaparar todos los títulos y récords que van desde los 900 metros hasta los 10.000 y ha estimado que en 5.000 puede realizar una marca de 12.45 minutos, diez segundos por debajo de la plusmarca de Moses Kiptanui, considerado otro de los talentos de este final de siglo.
Las únicas ausencias en los Mundiales serán las de las fondistas chinas, que desaparecieron de la competición en 1993, tras realizar asombrosos récords y copar las victorias en Stuttgart 93. En el equipo figuran nuevas atletas, ninguna de ellas vinculada a Ma Junren, que es el entrenador que consiguió el milagro con sus atletas.
La hora de las grandes citas
DOMINGO 6
15.15 horas: los marchadores, a punto de llegar. Entre los de cabeza pueden estar dos españoles, uno, Daniel Plaza, es el campeón olímpico; otro, Valentín Massana, el campeón mundial.
18.55: Silencio en el estadio. Va a comenzar la final de los 100 metros. Los hombres más rápidos del mundo en acción. Un canadiense, Donovan Balley, ha corrido este año en 9.91 segundos, a seis centésimas del récord mundial y 14 centésimas más rápido que Lindford Christie, el hombre que desde 1992 gana cuantos títulos disputa.
MIÉRCOLES 9
18.20: El récord del mundo se tambalea. Michael Johnson contra Butch Reynolds, el hombre que llevó a la Federación Internacional dé Atletismo ante la Corte Suprema de Estados Unidos, después de que fuera suspendido por dar positivo en un control antidroga.
VIERNES 11
16.15: Bubka, el hombre de los 35 récords mundiales y que jamás ha sido derrotado en la historia de los Mundiales, inicia su concurso en la final de pértiga. Enfrente, un surafricano de 21 años capaz de vencerle, si Bubka comete. el más mínimo error, como le sucedió en los Juegos Olímpicos de Barcelona.
SÁBADO 12
14.00: Una de las carreras más carismáticas del atletismo, el maratón, echa a andar. Martín Fiz, un vasco preparado por el mismo médico que ha convertido a Induráin en un extraterrestre, figura entre los participantes. Sale a proclamarse campeón mundial.
17.40: Powell, Lewis y Pedroso, en pos de los nueve metros en salto de longitud. La competencia puede alcanzar tal grado que no hay que descartar la superación de la mítica barrera.
DOMINGO 13
16.20: Final de 1.500 metros, hombres. Cacho ambiciona la triple corona. Sólo le falta el título mundial para conseguida, tras ser campeón olímpico y europeo. únicamente los elegidos, casos de Butka o Christie la tienen. Si es capaz, de sorprender al imbatible Morceli, sería digno merecedor de ella.
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