Grandes marcas de Johnson, Marsh y Ottey en Lausana

Michael Johnson no pudo batir el récord mundial de 200 metros, pero la reunión de Lausana fue espléndida, como es costumbre. La mejor parte correspondió a la velocidad, donde se vieron las mejores marcas mundiales del año en 100 metros (Merlene Ottey, 10.92 segundos) y 200 (Michael Johnson, 19.96 segundos). El francés Stephane Diagana batió, con 47.38 segundos, el viejo récord europeo de 400 metros vallas, en poder del alemán Harald Schmidt desde 1982 (47.48 segundos). En medio de la explosión de grandes registros, hubo un momento para el desencanto: Carl Lewis acabó en última posición en la prueba de 200 metros.Mientras el declive de Lewis es irremediable, la resistencia e Merlene Ottey a los rigores de la edad es sorprendente. La atleta jamaicana, de 35 años, ganó los 100 metros con una extraordinaria facilidad. Fue la única que bajó de los 11 segundos. Apenas una hora después, se impuso a la rocosa Gwen Torrence en los 200 metros.

El hombre más esperado era Michael Johnson. Se especulaba con la posibilidad de que el velocista estadounidense rebajara la plusmarca mundial de 200 metros (Pietro Mennea, 19.72). La carrera presentaba a los mejores especialistas actuales. Junto a Johnson estaban el namibio Frankie Fredericks (campeón del mundo en 1993), el británico Linford Christie (otro incombustible), el brasileño Robson da Silva y el noruego Gert Moen, uno de los pocos velocistas blancos capaces de entrometerse entre los campeones de raza negra. Carl Lewis también figuraba en la prueba. Eso fue: un figurante.

Johnson se encontró con más problemas de los previstos para ganar la carrera. Aunque siempre lideró la prueba . con su peculiar estilo (el tronco muy erguido y una gran frecuencia), Johnson se vio amenazado por Frankie Fredericks (20.07) y Linford Christie (20.12), que apuraron al norteamericano hasta el final.

El único astro que no participó en la prueba de 200 metros fue el estadounidense Mike Marsh, campeón olímpico en los Juegos de Barcelona. Tres años después parece en condiciones de reeditar los éxitos que tuvo en 1992. Ganó en los 100 metros con 9.96 segundos. El viento (2,3 m/s) superaba los márgenes permitidos para homologar la marca, pero el triunfo de Marsh tuvo el valor de producirse frente a sus principales adversarios en los próximos Campeonatos del Mundo. Marsh superó al jamalcano Donovan Bailey (10.02), el estadounidense Dennis Mitchell (10.03) y Linford Christie (10.03).

Venuste Niyongabo, el pequeño mediofondista de Burundi, confirmó que es el único atleta capaz de cuestionar la supremacía del argelino Nurredin Morceli en los 1.500 metros. Ganó la prueba con la mejor marca del año (3.32.37 minutos) y batió a dos presuntos aspirantes al reinado de la media distancia, el keniano William Kemei y el joven marroquí Hicham El Gerrouj.