Cruyff apela al orgullo de su equipo
Las bajas en el Barça y el Oviedo condicionan el partido
Atenazado por un pésimo saldo (dos puntos y dos goles a favor en los cuatro últimos partidos), el Barcelona visita hoy (17.00 horas) el feudo del Oviedo, un equipo que sólo ha perdido un encuentro en el Carlos Tartiere, sin otra alternativa que la victoria. Convencido que el quinto título de Liga consecutivo es prácticamente inalcanzable, Johan Cruyff ha instado a su equipo a acabar la Liga con dignidad y a asegurarse su participación la próxima temporada en la Copa de la UEFA."El Barcelona es el único equipo europeo que nunca ha dejado de participar en las competiciones continentales", argumentó ayer el técnico azulgrana, "y, además, por una cuestión de orgullo hay que sumar, como sea, los 20 puntos que quedan de Liga. Todo el mundo debe darse cuenta de que nos jugamos más que una plaza para disputar la Copa de la UEFA. Nos jugamos batir el récord de participación en los torneos europeos".
Cruyff admite sin reservas los problemas que arrastra el equipo, pero entiende también que sus jugadores están capacitados para ganar en cualquier campo si actúan sin complejos: "Los que jueguen están capacitados para conseguir la victoria". La larga lista de bajas puede ser, sin embargo, un grave contratiempo para los azulgranas. En Oviedo, no podrán jugar Busquets, Lopetegui, Guardiola, Hagi ni Sergi, que no se recuperó a tiempo de sus molestias musculares y su lesión en el tobillo.
Angoy, titular
La principal novedad será, por tanto, el debú como titular de Angoy. El portero, yerno de Cruyff, se ha alineado este año en dos partidos con el primer equipo (en Santander y en la Copa contra el Atlético), pero nunca formó parte del equipo titular. En Santander jugó dos minutos por expulsión de Busquets (el partido acabó 5-0) y en contra el Atlético salió al campo después que Lopetegui viera la tarjeta roja (el Barcelona perdió por 1-4). Cruyff, en cualquier caso, no adivina problemas en la portería: "Si Angoy no está preparado para jugar después de tantos años en el Barcelona, no lo estará nunca. Por eso no lo hemos dejado marchar". El portero suplente será el titular del filial, Julio Iglesias, que se incorporo el pasado jueves a los entrenamientos del primer equipo.
El Oviedo no es, por otra parte, un rival que se le de bien al Barça. El colectivo que prepara Radomir Antic sueña, además, con participar en la Copa de la UEFA, pese a sumar seis puntos menos que los azulgranas. Décimo clasificado con un positivo, el Oviedo merece todos los respestos de Cruyff. "Su situación en la clasificación demuestra que es un buen equipo. En los últimos tres meses ha conseguido unos buenos resultados".
El Oviedo afronta el partido como una particular reválida, tras el tropiezo inesperado en su reciente visita a Valladolid. Allí se rompió una larga racha de 11 partidos sin conocer la derrota y ocurrió justo en el primer compromiso en el que Antic tuvo que buscar un sustituto al lesionado Jokanovic, un futbolista que parece interesar a Cruyff.
La reválida de esta tarde consiste en que el Oviedo sea capaz de demostrar que sin el concurso del centrocampista serbio sigue siendo un equipo compacto. La derrota en Valladolid sirvió para abundar en la teoría, muy generalizada en Oviedo, de que Jokanovic es medio equipo. El joven Suárez será su sustituto ante el Barcelona, al tiempo que también reaparecerá el central Rivas.
Antic ha especulado durante la semana sobre la posibilidad que el capitán Berto retrase hoy su posición para encargarse de la vigilancia de Stoichkov. Eso fue lo que ocurrió en la primera vuelta, en el Camp Nou, con resultados satisfactorios, aunque no parece probable que la experiencia se repita. Para Antic el marcaje al búlgaro es una de las claves tácticas del partido. "El desgaste será muy grande para los dos equipos. El Barcelona va a sacar su orgullo y en ese aspecto va a tener mucha motivación", comentó el técnico cuando fue preguntado por la renqueante marcha del Barcelona.
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