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Entrevista:

"En Oviedo disfruto más del fútbol"

Robert Prosinecki, 26 años, afronta su primera temporada en el exilio. Tres años después de su sonoro fichaje por el Real Madrid, y decepcionado por su rendimiento, el club blanco se lo cedió al Oviedo. Allí, el futbolista croata consuela sus penas y trata de recuperarse para el fútbol. Parece que va por el buen camino.

Pregunta. ¿Cuesta digerir el paso de un equipo grande a otro tan modesto?

Respuesta. Yo quería tranquilidad y dar con un entrenador que quisiera darme la ayuda que necesitaba. Llegar a Oviedo me ha ayudado mucho. Me he reencontrado a mí mismo, juego bastante bien y el equipo va hacia arriba.

P. También le costó ser aceptado por la afición ovetense. Allí también le silban.

R. Es así. A mí siempre me exigen más que a otros.

P. España aún no ha visto al mejor Prosinecki posible.

R. Siempre se habla eso. Ahora mismo estoy contento con mi juego y con mi estado físico y psicológico. Después de todo lo que me pasó en Madrid, de esos tres años llenos de problemas, de lesiones, de pitos del público, de falta de adaptación y de muchas otras cosas, ahora tengo tranquilidad y menos presión. Algo fundamental para volver al fútbol, a jugar bien y a ser ese jugador que era antes. Estoy en un buen momento, a punto de ser ese Robert que todo el mundo dice que todavía no ha visto.

P. ¿Volverá al Madrid el año que viene?

R. No lo sé. Tengo un año más de contrato con el Madrid, pero ahora sólo quiero tranquilidad, pensar en el Oviedo y jugar bien lo que queda de Liga. Después, vendré a Madrid para hablar. Nunca se sabe lo que puede pasar. En fútbol, cada domingo cambia. Cada minuto es otra cosa en función de si marcas un gol o no te salen las cosas.

P. ¿No le da cierta envidia ver lo bien que le va al Madrid sin usted?

R. No. Yo me alegro porque tengo muchos amigos allí. En mi vida nunca he tenido envidias. Yo ya lo he ganado todo y no tengo envidia a nadie.

P. Al jugar, ¿se divierte más ahora que antes?

R. Seguro. Disfruto porque juego con bastante libertad y en mi verdadero puesto. Además, el Oviedo también tiene un público que necesita que su equipo gane en casa y es difícil, pero es diferente al Madrid. Aquí disfruto más del fútbol.

P. ¿El Madrid fue injusto con Prosinecki?

R. En algunas cosas, sí. Cuando necesité ayuda nadie me tendió la mano. Lo pasé mal. Tuve los problemas cuando me pude ir al Barcelona, con los médicos, con no poder entrenarme durante un mes. Sí, de verdad que allí fueron injusto conmigo. Es muy triste. Mientras vales, todo bien. Cuando no vales, ya es otra cosa. Si juegas bien, todos te ayudan. Si necesitas ayuda, nadie.

P. ¿Se ve con sitio en el actual Madrid, el de Valdano?

R. No quiero hablar de esto. Juega bastante bien, va primero y es mejor equipo. No he pensado si tengo sitio o no. Sé que juega más alegre que cuando estaba yo, se divierte más y lo hace mejor.

P. Se dice que su problema es que no se cuida.

R. Sólo son buscar motivos de por qué no me salen las cosas. Siempre se habló de Prosinecki como un vividor, que sale por las noches, que bebe. Pero no es verdad. Salía una vez y se decía que eran todas las noches; me bebía una cerveza y se decía que me lo bebía todo. Es así, no quiero disculparme. Yo vivo mi vida y quiero disfrutar lo que puedo, pero no es verdad lo que se dice. Salía, sí, como todos. Puede que a veces más que los demás, pero no soy un vividor.

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