Arantxa, imparable en Australia

Las estadísticas no engañan. Los números hechos públicos por la Women's Tennis Assotiation (WTA) demuestran con claridad que el liderato del tenis mundial no va a escapársele a Arantxa. Si esta pasada madrugada ha superado a la francesa Mary Pierce en la final del Open de Australia, esta mañana será ya la número uno del mundo. Pero si ha perdido, lo será dentro de una semana.Arantxa ganó ayer junto a Jana Novotna el título de dobles en Flinders Park al superar a Gigi Fernández y Natalia Zvereva por 6-3, 6-7 (3-7), 6-4. Era el tercero que conseguía en esta primera prueba del Grand Slam, tras sus triunfos en dobles en 1992 -junto a Sukova- y en mixtos en 1993, con Todd Woodbridge. Fue un primer paso, un preámbulo para su objetivo final: ser la primera española que gana el torneo individual y desbancar a la alemana Steffl Graf.

Disputaba Arantxa esta pasada madrugada uno de los partidos más importantes de su Vida ante la francesa Mary Pierce, quinta jugadora mundial. Una victoria le permitiría situarse en el liderato mundial y adquirir una ligera ventaja sobre Graf. Arantxa se colocaría con un coeficiente de 322,3837 puntos, mientras que la alemana baja por lesión en Australia- bajará el suyo hasta¡ 317,4046. Una derrota, en cambio, dejaría a Arantxa con un coeficiente de 307,91 puntos, a menos de 10 de la alemana, que seguiría mandando.

Sin embargo, Graf anuncié ayer que no participará tampoco en el torneo de Tokio, que se iniciará el próximo lunes y que ganó el año pasado. Una lesión en un gemelo la apartará del circuito femenino por otras tres semanas. La alemana lleva más de cuatro meses sin jugar, aquejada por una lesión en la espalda. Así pues, Graf perderá un buen cúmulo de puntos y será superada por la española. Eso ocurrirá tras la primera semana del mes de febrero.

Todas estas circunstancias, no obstante, no parecen preocupar en exceso, a Arantxa. "Cuando llegamos al Open de Australia le comenté que alejara de su cabeza todo el tema del liderato mundial. Que no se presionara con eso comentó ayer Gabriel Urpí, su entrenador. "A partir de aquel momento hemos hablado poco de esta cuestión".

El pasado jueves, Arantxa acudió a una cena para celebrar el cumpleaños de su padre, Emilio. Se había clasificado ya para la final y estaba muy distendida. Tiene mucha confianza. Ha mejorado el rendimiento de su drive y ahora incluso gana puntos con él. Que es la número uno lo ha demostrado ya en la pista disputando la final en cuatro de los últimos cinco torneos del Grand Slam y ganando dos -Roland Garros y el Open de EE UU

"Nosotros planteamos esta final como cualquier otro partido", explica Urpí. "Javier se ha quedado para ver la final y por la mañana peloteará unos 35 minutos con ella para preparar el encuentro". Como todos los días, Arantxa se levantará a las nueve de la mañana y tras desayunar se desplazará al club. Jugará con Javier y afrontará el partido. "Los aspectos técnicos están ya hablados. Ella conoce muy bien a Pierce y sabe lo que debe hacer para ganarla".

Pierce y Arantxa se han enfrentado cinco veces la española ha ganado en cuatro ocasiones. La última fue en la final de Roland Garros, la única del Grand Slam que ha disputado la francesa. Allí Pierce despreció a Arantxa, valoró poco su calidad. En Melbourne, en cambio, su actitud ha sido muy distinta. "Ahora juego más. con la cabeza. Sé que será un partido difícil, pero puedo ganarlo", dice. La trayectoria de Pierce ha sido más dura que la de Arantxa. Ambas han perdido 23 juegos y ninguna manga. Pero Arantxa no se ha enfrentado a ninguna cabeza de serie hasta la final y Pierce ha superado a Huber (loa), Zvereva (8a) y Conchita (2ª).

La sonrisa con la que acogió el triunfo en el torneo de dobles denotaba su tremenda ilusión por el momento que está viviendo. Arantxa no sólo es la mejor en individuales. Se ha convertido también en la compañera ideal para los dobles. La española ha disputado la final por parejas en los últimos ocho torneos en que ha participado. Desde finales de julio en Stratton Mountain, dondejugó con Conchita, ha ido cambiando de pareja pero siempre ha llegado a la final. Y ha ganado seis títulos contando el del Open de Australia.