Una derrota que aún duele
La pérdida del título de Liga atenúa la pasión en La Coruña
La afición coruñesa se toma este año con más calma el primer choque con uno de los grandes en el estadio de Riazor. La sombra del dramático partido ante el Valencia, que arrebató el título al Deportivo de la Coruña en la última jornada, ha dejado una profunda huella que aún perdura.Del triunfalismo exorbitado de aquel 14 de mayo se ha pasado a una actitud más prudente. A pesar de todo no queda ni una sola entrada para presenciar el partido de hoy desde hace ya 10 días, incluso el club ha establecido un sistema para que se aprovechen las entradas de los socios que no puedan acudir.
El cambio de mentalidad de los hinchas deportivistas se deja notar en los Riazor blues, la peña que más anima al equipo.
Rodri, portavoz de los blues, asegura que el ambiente ha cambiado: "Este año se empezó con mucho ánimo, pero las decepciones del Borussia y del Celta pasaron factura. La temporada pasada la gente se olvidó de la historia y se creyó que ya eramos un grande. Ahora se están dando cuenta que ganar un título es muy difícil". Rodri es optimista ante el partido de hoy pero reconoce que el 5-0 del pasado sábado "metió mucho respeto".
El sector más veterano de la afición también parece haber olvidado euforias pasadas. Luis Cedeira, presidente de la peña Casa Juana, cree que el público coruñés prefiere ahora. disfrutar del buen fútbol que marcarse metas ambiciosas entre otras cosas para no llevarse después grandes desilusiones: "Ser campeón de Liga es una lotería. Cada domingo tenemos que luchar por los puntos porque no somos ni el Madrid ni el Barcelona".
Lo que no ha disminuido en La Coruña son las ganas de animar al equipo. En los últimos tres años, se han, creado un centenar de nuevas penas. El fenómeno no se ciñe a la ciudad sino que se extiende por toda Galicia. Cada vez hay menos jugadores del Deportivo que no cuentan con una peña que lleva su nombre. El ingreso del club entre los grandes del fútbol español se ha visto acompañado por un fenómeno social que le ha llevado a pasar de 17 a 115 peñas.
El interés por el Deportivo ha desbordado hasta tal punto las previsiones que a partir de ahora será muy difícil presenciar un partido en Riazor si no se es socio del club coruñés.
Las entradas para el encuentro de hoy se agotaron tan pronto que hubo que tomar medidas de urgencia. Sólo podrían ver el partido los que adquiriesen un abono para lo que resta de temporada de Liga. Ahora el club roza la cifra de 28.000 abonados que coincide casi exactamente con la capacidad de aforo del estadio coruñés.
A pesar de este récord histórico, hay quien todavía recuerda que hasta hace poco más dé tres años el club aún militaba en Segunda División. El ascenso ha sido rápido.
Xurxo Souto, cantante del grupo Os Diplomáticos y miembro de la peña Urkiola, cree que la posición de su equipo sigue siendo privilegiada: "El Deportivo está en un lugar que en teoría no nos corresponde, todo lo que nos pase de malo no sería más que llevamos a nuestro sitio. Eso sí, si no ganamos la Liga este año habrá que tener paciencia y seguir intentándolo".
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