Clemente ataca a jugadores, técnicos y periodistas
Javier Clemente está crecido por los últimos éxitos de la selección española de fútbol. El técnico, respaldado por unos resultados que colocan a España en situación ventajosa para clasificarse para la fase final de la Eurocopa 96, aprovechó la conferencia de prensa de ayer en Oviedo para criticar, rebatir o lanzar retos y advertencias a sus demonios familiares. Hubo para todos, pero especialmente para sus colegas del Real Madrid, Valdano y Cappa, y para algunos medios informativos, entre los que ha descubierto un nuevo objetivo: Lobo Carrasco.
Clemente forzó ayer mucho más la máquina fuera que dentro del terreno. Tras una suave sesión de entrenamiento en el Carlos Tartiere, el seleccionador ofreció una larga conferencia de prensa en la que dedicó poco tiempo al partido contra Bélgica y mucho más a responder a sus críticos. Su intervención adquirió un tono amenazante con el paso del tiempo, cuando advirtió que responderá una por una a las intromisiones en su vida privada, "que es sagrada", en lo que pareció una referencia a informaciones recientes sobre su contrato con la Federación. Clemente dedicó comentarios poco elogiosos a Buyo, Valdano, Cappia y a "periodistas del grupo PRISA".Clemente dedicó una parte de la rueda de prensa a defender al periodista José María García de unas declaraciones recientes de Jorge Valdano: "Es como si yo dijese que la afición española debería de ajustar cuentas con los integrantes de cierto grupo, por criticarme a mí, al presidente de la Federación o a la selección".
El seleccionador aclaró más tarde que se refería al grupo PRISA, aunque centró sus ataques en la Cadena SER y, más concretamente, en el director de El Larguero, José Ramón de la Morena, y el comentarista Francisco Lobo Carrasco. Advirtió que si este último sigue criticando a los jugadores de la selección desvelará aspectos de su carrera futbolística, en lo relativo a su comportamiento extradeportivo "y de todo lo que le hizo pasar al bueno de Miguel Muñoz. Era un miedoso. Tiene mucho que callarse. Basta citar, como ejemplo, algunas de sus actitudes, como tirar la comida al suelo en las concentraciones, por lo que a punto estuvieron de expulsarle de ellas".
Clemente, en tono amenazante, advirtió que si desde dicha emisora "se meten en mi vida privada, que es sagrada, yo contestaré punto por punto, porque algunos tienen mucho más que callar y que perder que yo".
Tras ser advertido de unas declaraciones de Buyo [el jugador niega haberlas hecho], en las que el portero madridista afirmaba que no iba a la selección porque no es amigo suyo, Clemente indicó que "me extraña que Buyo no diga que estos jugadores que traigo son de altísima calidad. Por calidad futbolística, compañerismo, comportamiento y unión, tendría que ampliar mucho más el grupo de 18 para que Buyo tuviera cabida en esta selección. Además, Buyo no fue internacional con Miguel Muñoz, Luis Suárez, ni Vicente Miera. No sé por qué sorprende tanto que tampoco lo sea conmigo. Hay muchos entrenadores que tenemos ese criterio con él".
El seleccionador puso como ejemplo la entrada que le obligó a abandonar el fútbol para restar importancia a las de Jokanovic y Kiko, que provocaron el domingo las lesiones de Redondo y Marcelino: "La de Jokanovic es mala, pero he visto 6.000 peores que ésa. Y la de Kiko es más una pérdida de papeles".
Uno de los principales objetivos de Clemente ayer fue el entrenador del Real Madrid, Jorge Valdano, del que dijo en tono irónico que "ha empezado bien y tiene un gran futuro como entrenador, pero a ver dentro de cinco años dónde está y qué títulos ha conseguido". Sobre su ayudante, Ángel Cappa, con el que mantiene un duelo dialéctico en las últimas semanas, se limitó a decir que como alumno suyo en la escuela de entrenadores, le enseñó lo que no tiene que hacer con relación a otros compañeros. Aseguró que respetaba la teoría de los entrenadores que priman el espectáculo, pero que él prefería los que anteponen el resultado: "Para entendernos, me gusta más Bilardo que Menotti porque es más consecuente con lo que dice".
"Juegan a dos barajas", recalcó Clemente refiriéndose a los menottistas: "Juegan a los principios del fútbol espectáculo, para comer el coco a mucha gente, y a la del resultado cuando les ha ido mal y les interesa decir que en determinado partido han ido a lo práctico. No me parece bien los que venden una filosofía que es literatura pura y que no siempre se cumple". Según Clemente, la mayoría de los aficionados al fútbol opinan como él porque "cuando hay victoria, hay alegría".
Consideraría justo que Stoichkov fuese galardonado con el balón de oro, "porque es un jugador grande". Y añadió: "Yo se lo daría a Maldini [jugador del Milan]".
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