Karpov abronca en público a Campomanes
Pocas veces se le ha visto a Anatofi Kárpov tan enfadado. El campeón del mundo de la Federación Internacional (FIDE) se siente herido por el pacto entre Gari Kasparov, campeón de la Asociación Profesiorial (PCA) y el filipino Florencio Campomanes, presidente de la FIDE. Éste pretende cancelar la elección de su sucesor y organizar un duelo de reunificación entre los dos cam peones. Kárpov le echó ayer una bronca en el vestí bulo del hotel Cosmos de Moscú. Lo que sigue es una reconstrucción casi literal del diálogo.
Campomanes: No te había visto. ¿Cómo estás?
Kárpov: Ya sabes como estoy. Muy enfadado.
C: Creo que sería mejor mantener esta conversación en privado.
K: No encuentro ninguna razón para no hacerlo públicamente. Es irritante que ni Botvínik [excampeón del mundo, residente en Moscú] ni yo hayamos sido ínvitados a la ceremonia de inauguración de la Olimpiada.
C: ¿Por qué Botvínik debe ser invitado?
K: ¿Cómo puedes preguntarme eso? Botvínik fue campeón del mundo, contribuyó muchísimo a darle poder a la FIDE y ha sido un invitado de honor en todas las Olimpiadas desde que perdió el título.
C: En cualquier caso, la FIDE no puede hacer nada. porque eso es una prerrogativa del Comité Organizador. Además, tú sí has sido invitado.
K: Sí, en un fax fechado el 1 de diciembre; la ceremonía fue el día anterior.
C: Pero tú ni siquiera contestaste a la invitación para jugar con el equipo de Rusia.
K: Eso no es verdad. Contesté a finales de septiembre.
C: ¿Sí? Lo desconocía.
K: Los organizadores están mintiendo todos los días rompiendo todas las reglas éticas con el beneplácito de la FIDE, y el tuyo en particular.
C: En todo caso, están rompiendo las reglas que vosotros creásteis [probablemente, Campomanes se refiere a la URSS, hegemónica en el ajedrez durante 70 años].
K: ¿Nosotros? No, vosotros las habéis creado y ahora no valen nada. (Campomanes se marcha señalando con el dedo a Kárpov con aire amenazador).
K: Esto ya es el colmo. Voy a convocar una conferencia de prensa en los próximos días y hablaré con total claridad. Estoy harto de tanto juego sucio.
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