Sentencia en Oviedo para Prosinecki

Para Robert Prosinecki, cada partido de su equipo en casa empieza a ser como un plebiscito personal. Se trata de averiguar si el Oviedo gestionó su cesión para darle un aire estelar al conjunto o lo hizo para ser el señor financiación en el reciente plan de inversiones del Real Madrid. Ayer, la salida de Manel al campo en el descanso, para calentar músculos previamente a reemplazar al croata, la acogió el público local con vítores. Con ello no hacía sino dictar sentencia respecto a Prosinecki, recordando la excelente actuación de Manel, siete días antes, en sustitución del croata frente al Sevilla.Aunque el joven Manel, un jugador de verticalidad muy estimable y grandes posibilidades, goza ahora de los favores de la parroquia local, la antítesis de Prosinecki en el equipo es Jokanovic. Todavía sin alcanzar el nivel de la pasada temporada, el serbio es un tesoro para equipos como el Oviedo, en los que abundan jugadores generosos a la hora de ponerse a correr. La lentitud que Jokanovic aparenta es sólo un señuelo, porque su cabeza piensa con una rapidez endiablada. El servicio a Carlos que originó el gol de la victoria fue un modelo de eficacia creativa, lo mismo que su habitual repertorio de servicios en corto y en largo y su disponibilidad para entrar en cualquier refriega que plantee el partido.

El Valladolid se asignó a sí mismo el papel que se le suponía. Tras recibir el gol, se encontró sin guión de repuesto y sin ataque para hacer daño.