LA BELLA Y EL RÁPIDO.
La vieja ecuación piloto / top model es tan vieja como las carreras de coches. La fórmula volvió a repetirse el pasado fin de semana en un programa de la televisión alemana. A un lado, Michael Schumacher, el líder del Mundial de fórmula 1; al otro, la inglesa Naomi Campbell, una de las reinas de la pasarela. Dicen que la conversación fue estrictamente profesional. Schumacher anunció la prórroga de su contrato con Benetton y Naomi promocionó su novela Swan (Cisne), un bodrio hasta para los críticos más indulgentes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
