Berzin y los parásitos

"Sólo era un toque de atención", dice ahora Argentin. Como el padre hablando con el hijo. Pero el capitán del Gewiss, el hombre que ha llevado de la mano a Berzin hasta su triunfo en el Giro, estaba bastante enfadado cuando declaró ayer: "Berzin tendría que tener cuidado con los parásitos que le rodean".La historia viene por dos lados. Por los cantos de sirena y por los que le llenan al ruso complaciente la cabeza de pájaros. Las sirenas son los innumerables equipos que llaman a su puerta todos los días ofreciéndole el oro y lo que sea. Lo cuenta Bombini, su director, que tiene un poco de miedo de que el diamante se le S. vaya de las manos, se desconcentre deslumbrado por la riqueza: . "Van y le dicen: eres el mejor del mundo, vente con nosotros, que te daremos los millones que quieras y los compañeros que necesites".

La mejor oferta parece haber llegado de dos franceses, Sybille y Mollet, con fama de poco serios y que ya edificaron en su día el fracasado Tonton Tapis en torno a Stephen Roche. Éstos afirman que tienen un precontrato firmado por el ruso maravilloso, al que han aconsejado que se vaya a vivir a Montecarlo. "A mí no me preocupa eso", dice Bombini.. "Yo ya he depositado en la Liga Profesional un contrato hasta finales de 1996 firmado por Berzin. Y si quiere romperlo, tendrá que pasarse un año parado. Lo que pasa es que Berzin, que me ha dicho que quiere seguir con el Gewiss, está confuso con tanta gente a su alrededor diciéndole cosas".

Nosotros sólo podemos aconsejarle y ofrecerle ejemplos", añade Argentin. "Nosotros hemos respondido con los hechos. Lo que hice el día del Agnello por él, algo que no habría hecho ni por mí mismo, tendría que hacerle comprender muchas cosas. Y no se trata de retenerlo con nosotros a toda costa. Es él el que debe decidir lo que quiere hacer. Para ser un gran ciclista hacen falta cabeza y piernas y yo se lo recuerdo. Nosotros no podemos hacer nada más que avisarle". Y recordarle cosas. "Con nosotros ha ganado el Giro y la Lieja-Bastoña-Lieja", dice Bombini. "Creo que está claro que no se puede quejar del equipo".

Los pájaros en la cabeza llegan de vía científica. El médico Michele Ferrari, que dejó el Gew¡ss hace un mes a causa de sus declaraciones abiertas sobre el dopaje, sigue tratando, personalmente al ruso. Proponiéndole proyectos el récord de la hora e influyendo en' su preparación. Argentin también se refería a eso. Dice Bombini, el director que descubrió a Berzin cuando éste era aficionado y se lo llevó a vivir a su pueblo: "Tampoco me preocupa en exceso que otros puedan estar llevando su carrera. En este Giro por lo menos ha sido disciplinado y siempre me ha obedecido y atendido a nuestra planificación".