Los temores de Bruquera

Sergi Bruguera prefiere ir de víctima, igual que el año pasado. Aunque esta vez es el campeón, Sergi no para de decir que no tiene la misma, confianza que en 1993, cuando jugó el mejor tenis de su vida. Hasta ahora, Bruguera ha resuelto con comodidad todos sus encuentros. Pero hoy afrontará a uno de los primeros cabeza de serie, el ucranio Andréi Medvedev.Sergi es el único jugador de la parte alta del cuadro que no ha perdido aún ningún set. "Eso me beneficia", comenta. "Pero no me convierte en favorito. El tenis no es matemático". En cambio, lo que sí pide desde que llegó a París es que haga buen tiempo. "Me conviene que la pista sea más rápida, como el año pasado", dice. Jugar contra Medvedev. es un mal trago que hay que pasar. "Me ha ganado cuatro veces y no me gusta jugar contra él. Sólo me favorecerá que le pista esté rápida".