Mendiluce dice que desarrollará su labór humanitaría desde el Europarlamento

"Mi labor humanitaria desde una organización de Naciones Unidas había tocado techo; ahora intentaré desarrollarla desde una estructura más política". Así explicó ayer el actual representante del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ante la Unión Europea, José María Mendiluce, su decisión, anunciada el lunes, de aceptar la oferta del PSOE y presentarse en su lista a las elecciones europeas de junio.

Saltó a la fama a principios del verano pasado cuando, al concluir sus 13 meses de estancia en Zagreb como representante de ACNUR para la antigua Yugoslavia, levantó la voz para denunciar con una contudencia inusitada por parte de un funcionario de Naciones Unidas "la barbarie" que padecía Bosnia. "Sólo puede pararse con el único lenguaje que entienden los bárbaros: el de la fuerza".Lleva ocho meses en Bruselas y acaba de sucumbir a lo que él llama los comentarios y los sondeos" que le hicieron los hombres de Cipriá Ciscar, el secretario de organización del PSOE. "La idea de que fuese candidato se les ocurrió a ellos y a mí simultáneamente", aseguró en una conversación telefónica con EL PAÍS.

Mendiluce, de 43 años, afirma ignorar en qué puesto va a figurar en la lista. Entre risas reconoce, sin embargo, que irá en un lugar "cómodo" como para tener garantizado el escaño. "Aquí", explica refiriéndose a ACNUR, "no se puede pedir excedencia y era por tanto lógico que me diesen ciertas garantías...".

¿Por qué respalda con su prestigio a un PSOE salpicado por escándalos de corrupción y a un Gobierno español que forma parte de esa comunidad internacional responsable de la tragedia bosnia? "Voy como independiente en la lista porque comparto los ideales de la socialdemocracia aunque no estén de moda", contesta. "España no ha tenido además un papel determinante en la política inconsistente seguida por la comunidad internacional en la ex Yugoslavia".

En puestos burocráticos o sobre el terreno, en Angola, Nicaragua, el Kurdistán o los Balcanes, Mendiluce ha dedicado 15 años a impulsar la labor humanitaria de la ONU. "No pienso echar esa experiencia por la borda", afirma. "Al contrario, quiero seguir haciendo lo mismo pero desde una estructura más política como el Parlamento Europeo", recalca.

"Me preocupa el futuro de una Europa incapaz de atajar conflictos como el de Bosnia", prosigue este guipuzcoano. "Hay que evitar que se repitan, por parte de la comunidad internacional, actuaciones tan débiles que facilitan su extensión como una mancha de aceite". "La culpa es achacable a la clase política en su conjunto, pero también a la apatía de la opinión pública que no ha presionado suficientemente a sus gobernantes", añade.

"No se puede ir más lejos"

"Nuestros intentos por despertarla habían tocado techo", continúa para justificar su vuelta a la política que abandonó a finales de los 70, después de militar en las filas del Movimiento Comunista. "No se puede ir más lejos desde una organización humanitaria", explica. "Además es muy fácil hacer críticas a los Gobiernos vestido con el manto humanitario. Ese foro parlamentario me va a permitir ampliar el eco de la voz de toda la gente dedicada a tares humanitarias".

El candidato a eurodiputado ensalza ya el papel de la Asamblea de Estrasburgo. No alarga, sin embargo, mucho el discurso sobre sus virtudes. "Comparto cierta decepción sobre algunos aspectos de su funcionamiento", reconoce.

Apuntándose a la lista del PSOE no tiene la impresión de apostar por un caballo perdedor. Se resiste a creer que los socialistas vayan a ser, por primera vez, derrotados por los populares en una elección nacional. "Los sondeos que circulan se hicieron antes de que se conozca la lista. y son, por tanto, poco científicos", señala.