Japón anuncia un nuevo plan inversor de casi 20 billones de pesetas

La tregua política observada en Japón tras la aprobación parlamentaria de cuatro proyectos legislativos contra la corrupción y el fraude del sistema electoral, unida a la inminente publicación de un paquete de medidas de estimulación económica de envergadura sin precedentes -casi 20 billones de pesetas-, dispararon ayer la Bolsa de Tokio hasta su mayor ganancia en casi cuatro años.

Un optimismo hace tiempo ausente se expandió por los corros financieros e industriales y el índice Nikkei, que promedia los 225 valores más activos del mercado, subió 1.471 puntos (un 8%) y quedó situado en los 20.229 * Se negociaron 800 millones de acciones y el incremento del índice fue el tercero en importancia en sus 44 años de historia.El diario Asahi Shimbun adelantó en portada que el paquete dispuesto por la coalición gubernamental, cuya puesta a punto se retrasó debido a la incertidumbre política de las dos últimas semanas, . suma aproximadamente 137.000 millones de dólares (19,6 billones de pesetas), incluyendo una desgravación del impuesto sobre la renta del orden de los 50.000 millones de dólares. Este presupuesto supera la ampliación de 125.000 dólares aprobada en abril de 1993 por el ejecutivo del conservador Partido Liberal Democrático (PLD), apartado del poder tras las elecciones generales del pasado mes de julio. No hay coincidencia sobre el monto desembolsado en esta última partida, aunque varios comentaristas locales consideraron que la anterior administración jugó al alza con los números para fortalecer la imagen de aquel empujón.

Las fuentes bancarias consultadas ayer indicaron que "despejada la incógnita política y ante el anuncio del nuevo paquete de medidas ha habido una contrarreacción a la caída de casi mil puntos de hace una semana. Los inversores se han lanzado hacia la economía real porque ven sus grandes posibilidades de futuro". Según esta fuente, el nacionalismo japonés, manifestado en la coincidencia de Gobierno y oposición de terminar la pugna política para abordar la lucha contra la recesión, fue un factor decisivo en el compromiso que llevó a la aprobación parlamentaria de las reformas. El bajón del índice se produjo después de que el plenario del Senado hubiera rechazado las propuestas modernizadoras del primer, ministro, Morihiro Hosokawa, y partidos que re acompañan en la alianza.

El paquete de medidas de próxima promulgación contiene, además de los 50.000 millones de dólares destinados a aumentar la capacidad adquisitiva del consumidor mediante el recorte del impuesto sobre sus rentas, 37.000 millones de obras públicas, compras gubernamentales de tierras por cerca de 17.000 millones, otros 9.000 millones en préstamos ventajosos para la adquisición de viviendas -un sueño para la mayoría de los japoneses por su astronómico precio-, créditos a la pequeña y mediana empresa, y otras inyecciones en ayudas a los agricultores, subsidios contra el paro y de promoción de la desregularización ecónomica. Entre las obras públicas destacan aquellas relacionadas con la mejora de la red nacional de alcantarillado y nuevas instalaciones educativas y sanitarias.

El Gobierno intenta tener listo el grueso de las medidas antes del viaje que el próximo día 11 efectúa a Washington el primer ministro nipón.