Los señores del gol

Rara es la ocasión de gol en la que no andan metidos, ya sea porque son los ejecutores de la última cesión o los que la rematan. Escudriñan espacios, estudian posibilidades, calculan dirección y velocidad del envío, establecen complicidad con el compañero, escogen el hueco preciso y lanzan el órdago. Son los más cotizados y los valores más preciados de cada equipo, porque de ellos depende el gol, a veces en un porcentaje altísimo. Es el caso en este campeonato del croata Davor Suker, que ha participado en 13 de los 16 goles que lleva el Sevilla, al darlos o marcarlos. Tras él, aparecen el madridista Míchel y el azulgrana Romario, sin duda los profesionales más valiosos para sus respectivos equipos.Suker, de 25 años, llegó en 1991 a España procedente del antiguo Dinamo de Zagreb. En Sevilla pronto se le buscó apodo, Sukerman, dada su potencia y efectividad ante el gol. Para esta temporada ha prometido 20 tantos, una cantidad insuficiente para ser Pichichi. Tampoco busca este galardón. "Es muy difícil luchar contra Romario, porque él, jugando en el Barcelona, tiene cinco o seis ocasiones de gol en cada partido", opina el delantero del club andaluz.

Sin embargo, la valía de Suker esta temporada, que le permite estar a la cabeza de los mejores jugadores cuando ya ha transcurrido un cuarto de campeonato, no se mide tan sólo por su acierto rematador. Ha dado cinco goles a sus compañeros (Simeone, Moya, Ferreira, Monchu y Marcos), poniendo siempre el balón en sus cabezas, y ha provocado el único penalti que lleva el Sevilla a su favor. Para completar la faena, él mismo se encargó de transformarlo en gol.

Dianas lleva ocho y las ha marcado de todas las maneras y distancias. El citado de penalti, dos de falta, otros tantos de remate seco para culminar la jugada de su equipo, otros dos después de parar y controlar el balón en búsqueda del hueco por donde batir mejor al portero, y uno de cabeza.

Azote de defensas

Suker se ha convertido en el azote de las defensas. Es un delantero en punta, cuya zona natural es la izquierda, pero también arranca desde atrás, por la derecha, para buscar el quiebro hacia el interior y conseguir en carrera una posición ventajosa para el disparo. Su zurda es admirable por la potencia, colocación y efecto que logra transmitir al balón. De ahí que los contrarios tengan dificultades en atajar sus centros por alto al área.

Corre, dribla, tira, saca los golpes de esquina, tira las faltas, da la cara y, además, juega íntegramente todos los partidos. De los 53 jugadores del censo de 440 de Primera División que llevan jugados los 720 minutos de campeonato, él es uno de los destacados.

El alto rendimiento que está consiguiendo se materializa en que de los 13 puntos que suma el Sevilla, 9 se deben a él: marcó un gol del 1-2 en Zaragoza y del 2-1 al Atlético, los dos del 2-2 en Valladolid y del 0-2 en Oviedo, dio dos y marcó otros tantos del 4-0 al Tenerife y provocó todos del 0-3 en Lleida.

Michel es el siguiente jugador que está teniendo mayor presencia en el camino del gol, no sólo porque sigue siendo el que más asistencias da, sino porque ha provocado, y después marcado, los tres penaltis del Real Madrid, lo que eleva notablemente su puntuación. Goza, además, de un valor añadido: al igual que Suker, es de los pocos cuya presencia en el campo se considera fundamental, pues no ha sido sustituido ni un solo minuto en las jornadas disputadas.

Romario completa la tripleta estelar con un gol que dio a Begiristain y los nueve que ha marcado: tres a la Real Sociedad, tres al Atlético de Madrid, dos al Osasuna y uno al Valladolid.

Del resto de jugadores que mayor efectividad están mostrando esta temporada se observa que los equipos a los que pertenecen son precisamente los que están ocupando posiciones destacadas en el campeonato.

Fran, la calidad

Suker ha lanzado al Sevilla y Romario, Begiristáin y Guardiola al Barcelona; Fernando y Mijatovic catapultan al Valencia; Michel y Alfonso sacan de la crisis al Real Madrid; Guerrero y Ziganda materializan las ilusiones del Athlétic de Bilbao y Kodro las de la Real Sociedad, mientras que Fran pone el toque de calidad al Deportivo. Son, cada uno en los suyo, los señores del gol del fútbol español.