El abandono del 'Fortuna' en la Vuelta al Mundo culmina su mala campaña
La retirada del maxi de Tabacalera Fortuna cuatro días después de tomar la salida de la regata Vuelta al Mundo constituye un hecho sin precedentes en esta prueba. La empresa pública medita dejar de patrocinar la vela española a consecuencia de la escasa rentabilidad que le está produciendo el proyecto Fortuna. Fue la empresa pública española la que tomó la decisión de retirar el barco y no permitir su continuidad en la prueba después de haber reparado los desperfectos en el mástil.
El 'Fortuna', cuyas sucesivas reformas desde que Tabacalera decidiera participar en la presente edición de la Vuelta al Mundo han costado alrededor de 300 millones de pesetas, regresa en estos momentos hacia Southampton sin su mástil de mesana y con dos tripulantes malheridos, tras anunciar el jueves su retirada definitiva de la regata. El patrón del barco, el inglés Lawrie Smith, manifestó en un principio su voluntad de terminar la primera etapa utilizando el mástil que aún queda en pie, tras la rotura del de mesana el pasado martes. La empresa Tabacalera, sin embargo, se ha negado a pagar los 30 millones de pesetas que cuesta el citado mástil, forzando la retirada del barco.Fuentes de Tabacalera afirman que la decisión se tomó porque el barco ya no podía aspirar a la victoria final, ya que el Fortuna habría perdido bastante tiempo al acabar la primera etapa. En España, destacados regatistas y empresarios de la naútica acusan al director técnico del Fortuna, Javier Visiers, de ser el principal responsable de este fracaso y de la posible retirada de la empresa pública del patrocinio de la vela en nuestro país.
"A Tabacalera la han asesorado mal en el tema de la Whitbread". Estas palabras del presidente de la federación española de vela, Fernando Bolín, sintetizan de forma diplomática la opinión de la mayoría de los aficionados a la vela. Destacados regatistas ya criticaron en su día el desarrollo técnico del proyecto. Jan Santana, patrón del Fortuna en la Whitbread de 1989, criticó la decisión de despedir a la tripulación española y la contratación del equipo anglosajón del inglés Lawrie Smith en el mes de marzo: "En vez de cambiar de tripulación, Tabacalera tenía que haber empezado por cambiar de director técnico".
Toni Guiu, que participó en la Whitbread de 1985 a bordo del Fortuna, cree que el fracaso de barco "es la consecuencia lógica de la mala gestión de Visiers". El regatista catalán añade: "Es una pena, porque Fortuna dejará la vela". Toni Tió, velero de reconocido prestigio, manifiesta que el proyecto "no ha estado a la altura de la Vuelta al Mundo desde el punto de vista técnico", y señala a Visiers como responsable.
Sixto Heredia, director de promoción de Tabacalera, afirmó que "según los técnicos, el barco estaba preparado para ganar", y reconoce que la empresa estudia retirarse de la vela. Bolín indicó que se reunirá el lunes con el presidente de Tabacalera, Pedro Pérez, para tratar este asunto.
Otras fuentes de la empresa pública han manifestado que se está estudiando el contrato con Lawrie Smith, cuyos honorarios para la Whitbread se acercaban a los 50 millones de pesetas, para ver en qué términos se puede rescindir. Estas mismas fuentes consideran la retirada del barco como una medida para evitar un mayor gasto, una vez perdidas todas las opciones a la victoria final.
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