Schuster anuncia su marcha del Atlético
Bernd Schuster dejará el Atlético de Madrid a final de temporada. Las discrepancias con el presidente, Jesús Gil, le han decidido a abandonar el club un año antes de cumplir el contrato que le ligaba a la entidad hasta 1994. "He llegado a un acuerdo con el presidente para rescindir el contrato. Me voy sin cobrar el dinero correspondiente al próximo año, pero me marcho contento y feliz". Schuster se ha marcado como objetivo terminar la temporada de la forma más decorosa posible: "No quiero engañar a nadie, sólo quiero concentrarme en los partidos que quedan, que es mi obligación".
Las declaraciones de Schuster que publicó el diario Marca el pasado lunes en las que criticaba el funcionamiento del club ("Aquí se hace todo al revés"; "el entrenador que venga lo hará con los pantalones bajados") han precipitado los acontecimientos. Gil contestó que lo mejor que podía hacer el centrocampista alemán era "jugar bien contra el Parma y marcharse, y no crear más problemas".Schuster ha aceptado el envite y ha optado por dejar el club el 30 de junio, un año antes de lo previsto. "No voy a entrar en una guerra con el presidente. Ya le conocemos, ha largado y va a seguir largando hasta el final. Yo tengo mi opinión y él tiene la suya y en algunas cosas no estamos de acuerdo", explicó.
El jugador insistió en que su etapa como rojiblanco ha sido muy positiva para él: "He estado muy feliz y me voy muy feliz; se ha cumplido un ciclo, eso es todo". No quiso desvelar, sin embargo, los entresijos que han provocado su decisión: "Aquí han pasado cosas muy graves que no voy a decir".
La polémica ha rodeado a Schuster a lo largo de la temporada. Su negativa, en diciembre, a tratar con antibióticos [es naturista] una lesión en su tobillo derecho provocó su primer enfrentamiento con el presidente. Gil prometió "mano dura", con el jugador, que reapareció más tarde de lo inicialmente previsto por los médicos del club.
La llegada del técnico argentino Omar Pastoriza, tras la destitución de Luis Aragonés, trajo un problema añadido para el alemán. Pastoriza recomendó el fichaje de su compatriota Villarreal, un jugador que ocupa la misma posición que Schuster. El bajo rendimiento del centrocampista argentino, cuestionado por Gil y apartado de las alineaciones, alejó las especulaciones sobre la posible incompatibilidad en el terreno de juego de los dos jugadores.
El nuevo entrenador del equipo, Cacho Heredia, que ayer dirigió su primer entrenamiento, no quiso pronunciarse sobre la marcha del jugador: "No quiero hablar de la temporada que viene, porque no sé si voy a continuar aquí. Schuster es miembro de la plantilla y yo cuento con él, tanto en casa como fuera [Gil había comentado que la aportación de Schuster lejos del Vicente Calderón era muy escasa]. Heredia dijo que se había encontrado con una plantilla muy motivada y se mostró conciliador: "Villarreal es un jugador útil para el esquema que yo quiero para el equipo, pero todavía se tiene que adaptar más. Le falta un poco de ritmo". Sobre Juanito, otro de los candidatos a abandonar el club por deseo de Gil, dijo: "Si cumple con su trabajo, conmigo no tendrá problemas".
El decálogo de Gil
Cacho Heredia también defendió el decálogo de Gil, un documento que contiene. las claúsulas que los futuros entrenadores del Atlético de Madrid tendrán que aceptar para firmar su contrato: "No es algo tan novedoso; es importante para el bien de todos y para el bien de la sociedad. De todas formas yo no he firmado todavía, pero no va a haber ningún problema".
El decálogo, formado curiosamente por once anexos, especifica entre otros los siguientes puntos:
El entrenador será el responsable de las alineaciones que vendrán dadas sobre criterios objetivos de rendimiento.
Después de cada partido el entrenador redactará un informe que remitirá a la gerencia. 1
El entrenador facilitará el informe correspondiente sobre los equipos inferiores a los que tendrá que observar periódicamente [la cantera del club está prácticamente desmantelada]. También facilitará un informe sobre las actuaciones arbitrales.
El entrenador tendrá cumplida información sobre los fichajes que se produzcan durante el tiempo que esté al frente de la dirección técnica del equipo, así como las condiciones económicas, ya que será requisito indispensable para la contratación de cualquier nuevo jugador, que se facilite por escrito que se efectúa bajo su responsabilidad.
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