Clemente se plantea la vuelta de Salinas a la selección

La carencia de goleadores ha obligado al seleccionador español de fútbol, Javier Clemente, a estudiar la posibilidad de convocar a Julio Salinas para el partido contra Irlanda, el 18 de noviembre, correspondiente a la fase clasificatoria para el Campeonato del Mundo de Estados Unidos 94. Salinas apenas ha intervenido esta temporada en la Liga, aunque ayer jugó en el primer partido de la Supercopa y marcó un gol. Johan Cruyff, el técnico del Barcelona, le ha mantenido al margen de la mayor parte de las convocatorias. Este dato es el más preocupante para Clemente, que siempre ha defendido la eficacia del controvertido delantero. Asimismo, mantiene su confianza en Emilio Butragueño al considerar que el jugador del Real Madrid se halla a la misma altura o superior que en campanas anteriores.Clemente acudió ayer al Cam Nou para observar a Salinas. Él era uno de sus objetivos prioritarios en un partido, Barça-Atlético, que reunía a más de la mitad de los futbolistas habituales en la selección nacional. Sin embargo su viaje estaba mediatizado por la situación que atraviesa Salinas en el club catalán. Clemente no supo hasta última hora si jugaría o no frente al madrileño. Esta incertidumbre es la misma que tiene con respecto a su llamada para la selección. Aunque confía en él -le conoce desde su etapa de juvenil-, teme que su inactividad haya sido demasiado larga y perjudicial. Salinas ha marcado ocho goles en sus 29 intervenciones como internacional. Debutó en 1986, ante la antigua Unión Soviética (2-0), y su última comparecencia fue en el Mundial de Italia 90, contra Yugoslavia (1-2).

Los problemas de Clemente se derivan casi exclusivamente de la ausencia de un delantero goleador. En su opinión, el resto del equipo es sólido y tiene calidad. Pero también es consciente de que sólo ha marcado un gol en los tres encuentros que ha jugado bajo su dirección: frente a Inglaterra y por medio de Fonseca.

Fonseca y Claudio

Clemente ha alineado a dos arietes específicos. Fonseca, del Español, jugó frente a Inglaterra y Lituania; Claudio, del Deportivo, ante Irlanda del Norte. En ningún caso dieron la sensación de poder desequilibrar los partidos con sus acciones. Pero en España no hay ningún Van Basten, Papin o Bergkamp. Clemente ni siquiera encuentra a alguien que marque goles con cierta regularidad. En este punto, medita la posibilidad de reclamar de nuevo a Salinas y Butragueño, dos futbolistas que originan pasiones encontradas. Los dos tienen, sin embargo, el aval de una buena producción de goles con la selección, por la que han pasado 25 delanteros en los últimos ocho años.

El caso de Salinas es el más peculiar. Criticado y defendido por igual desde su aparición en el Athletic de Bilbao, se erigió en el compañero más fiable de Butragueño. Su heterodoxia ha sido decisiva en muchos goles y también en muchos fallos. En cualquier caso, Clemente está convencido de que es de los pocos con instinto en el área.