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Entrevista:

"Con el balón en movimiento se desactivan las especulaciones"

Santiago Segurola

Pregunta. ¿Qué opina del ambiente de sospecha que se ha levantado?Respuesta. Es cierto. El fútbol me gusta menos esta semana que la anterior. Pero hablo del fútbol como fenómeno. El juego me sigue pareciendo igual de puro y atractivo. Ya que partimos de la presunción de culpabilidad, me gustaría decir que soy una persona equilibrada, que ha caminado derecha por la vida. Por mucho que me empujen, ya sé cuál es el camino. Me niego rotundamente a olvidarme del pasado. Lo que soy lo he forjado por los sitios donde he pasado. Es bueno añadir que para mí el Madrid fue una de las escuelas más importantes de mi vida deportiva. Allí me enseñaron a ganar, no a perder.

P. ¿Le han dolido las declaraciones de Núñez y de Cruyff?

R. No me creo las declaraciones de Cruyff. Con todo el derecho que me da la admiración que le tengo, prefiero pensar que eso que he leído no lo ha dicho. En cuanto a Núñez, me parece un hombre que no salió del fútbol, que aterrizó en el fútbol. Son conceptos distintos. Quizá por no conocer las dificultades del juego cometa determinadas irrespetuosidades que no están a la altura de la grandeza del Barcelona, a la grandeza de su historia y a su grandeza actual. Por otra parte, siempre he pensado que la duda ofende, y no admito que ponga en entredicho mis ganas de vencer. Él dice: "No sé si Valdano tendrá ganas de ganar el domingo". Yo no me permitiría decir si a Núñez le van a dar alguna vez en su vida ganas de pensar antes de responder a una pregunta.

P. ¿Hasta qué punto todo este ambiente perturbará a su equipo?

R. Cuando el balón se pone en movimiento desactiva todo tipo de especulaciones. Éstas son opiniones que parten de la mala intención o de la falta de comprensión de lo que es el fútbol.

P. Algunos jugadores del Tenerife han manifestado que están dispuestos a recibir dinero por ganar al Madrid. ¿Cómo ve esa postura?

R. Desde un plano ético, nunca me provocó ningún bochorno este tipo de incentivos. De todas maneras, conviene advertir que yo personalmente me voy a mantener absolutamente al margen y no voy a permitir que nadie hable en mi nombre. Si algún intermediario aparece por algún sitio invocándome, que le hagan detener, porque es un delincuente.

P. Llegamos al partido más importante de la Liga y sólo se habla de dinero y bajas intenciones. ¿Se siente defraudado?

R. Es la parte del fútbol que no me interesa y la par te contra la que he luchado toda mi vida. Ahora estoy involucrado en medio de una historia casual, que no he elegido. Francamente me da más pereza que otra cosa. Sabemos que existe esa parte y punto.

P. ¿Tiene el corazón dividido ante este partido?

R. Me parece un error que la gente sufra por mi corazón. El corazón mío está feliz porque acabo de cumplir un gran objetivo, que es mantener al Tenerife en Primera. Segundo, que mi compromiso con el Tenerife es mucho más que contractual. Además, en dos meses uno termina teniendo con los jugadores una serie de compromisos éticos que en ningún caso me puedo dar el lujo de vulnerar. Con los jugadores me tengo que ver la cara todas las semanas. No me espanto por esta historia y además mi obligación es conservar la naturalidad.

P. Como analista de fútbol, ¿en qué situación quedaría el Madrid si pierde?

R. Creo que el Madrid se juega en este partido algo más que la Liga. Se juega su futuro a medio plazo, por lo menos. Creo que en el mundo del fútbol hay tendencias, que siempre se parte de un gran salto cualitativo, y si el Barcelona da ese salto quizá le mantenga en la cumbre durante algún tiempo.

P. ¿Cree que este partido puede significar el punto de inflexión del fútbol español: la toma de la Bastilla por parte del Barça?

R. Yo creo que estamos hablando de este partido como si fuera el detonante de una bomba futbolística, como si en Tenerife se fuera a apretar un botón del que depende el futuro futbolístico de este país. Yo no me olvido de que hay 37 partidos detrás, y no hace falta tener mucha memoria para recordar que el Tenerife le ganó al Barcelona brindando al Madrid la posibilidad de despegarse.

P. ¿Ve al Madrid como un equipo accesible?

R. Primero hay que valorar lo que ha hecho el Madrid, porque jugando bien gana a cualquiera. El asunto es mantenerse con todas las contradicciones que ha tenido a lo largo de la temporada. Así y todo, los espasmos brillantes del Real Madrid coincidieron con sus peores momentos. Hablo del partido frente al Barcelona en el Camp Nou, hablo del partido frente al Atlético. Le falta una pedalada para llegar a la cumbre, y es en Tenerife, frente a un equipo que, al fin y al cabo, ha estado peleando la promoción hasta la última jornada. Ahora bien, lo que hace el Tenerife es lo que menos le gusta al Madrid en términos tácticos.

P. ¿Cuál es esa debilidad?

R. Presión en el centro del terreno de Juego y una línea defensiva adelantada.

P. Y la zona.

R. Sí. Yo creo en la zona y lo respeto hasta las últimas consecuencias. Habría que avisar que el Tenerife juega siempre a ganar y que su actitud atacante no ha tenido que ver con su posición clasificatoria. El Tenerife saldrá a ganar, y en ningún caso va a defender un empate o una victoria mínima.

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