Preocupación en el CSD por la detección de casos de utilización de la sustancia prohibida HCG

El Consejo Superior de Deportes (CSD) siente preocupación por la posible utilización en el deporte español de una nueva sustancia conocida como HCG, que puede enmascarar el uso de anabolizantes. En los más de 600 últimos controles realizados en España, se han detectado 41 posibles casos en los que se esté utilizando dicha sustancia, que afectan, fundamentalmente, a deportes como el ciclismo, el atletismo y el fútbol. El HCG figura en las listas de sustancias prohibidas del COI, pero como su detección no es todavía fiable al ciento por ciento, no suelen deparar casos de controles "positivos". El control del CSD investiga estos hechos con carácter científico, con vistas a determinar un sistema de detección.

La sospecha de que se esté utilizando en el deporte de alta competición una sustancia denominada HCG (Gonadotrofina coriónica humana), que es una proteína que produce la placenta pero que puede enmascarar el uso de anabolizantes, data del año 1988 cuando se efectuaron unos primeros experimentos con motivo de la celebración de los Juegos de Seúl.La preocupación del COI, desde entonces, estaba fundada por el hecho de que el uso del HCG pudiera estar enmascarando una proliferación del uso de anabolizantes, cada vez más fáciles de detectar, y que por ello las estadísticas señalaran un aparente descenso en el uso de estas últimas sustancias. El COI decidió incorporar el HCG a la lista de sustancias prohibidas en 1990 pero se presentaba un grave problema: no existe todavía un sistema que implique una detección fiable al 100%. Y si no existe una fiabilidad absoluta no se puede declarar un positivo, con las sanciones que ello acarrearía, por un lado, y los problemas jurídicos que ocasionaría una sanción errónea.

A partir de 1990, varios laboratorios, de los reconocidos oficialmente por el COI, trabajan en fórmulas para desarrollar una detección fiable, entre ellos el del Consejo Superior de Deportes. Ello ha llevado a tratar de buscar la posible existencia de HCG en algunos de los controles que se hacen a deportistas en España, procedimiento que se ha hecho al azar.

De un total de más de 600 muestras efectuadas en unos diez deportes, se han encontrado indicios de HCG en 41 casos, lo que significa un porcentaje pequeño pero que mueve a la sospecha. Encontrar HCG en un atleta masculino ya viene a ser extraño, por cuento se trata de una proteína que produce la placenta y que sólo aparece en un varón en el caso de sufrir algún tipo de tumor. Sin embargo, ninguno de estos casos puede considerarse como oficialmente "positivo". El laboratorio se limita en esto casos a elevar la documentación pertinente al COI para su conocimiento. Algunos de estos 41 casos corresponden a investigadores voluntarios, es decir personas que se introducen la sustancia para colaborar en la experimentación.

La utilización de la HCG por el deportista puede perseguir tres finalidades, según un portavoz del laboratorio de Madrid: "aumentar la producción de testosterona endogena testicular u ovárica", "evitar los efectos colaterales que pueden producir la administración de esteroides anabolizantes" y "buscar la posibilidad de enmascarar la eliminación de anabolizantes".

Controles por sorpresa

El CSD prosigue, por otro lado, con su política de controles por sorpresa, los cuales se efectúan, en la mayoría de las ocasiones, a petición de las propias federaciones. De forma unilateral, el CSD impone controles por sorpresa a aquellos deportistas becados que utilizan las instalaciones de la Residencia Blume. La federación que más controles por sorpresa ha propuesto es la de atletismo, según un portavoz del laboratorio del CSD. A partir de que entre en funcionamiento la Comisión Nacional de Dopaje, los controles por sorpresa podrán efectuarse, por ley, a cualquier deportista con licencia.