Un policía, condenado a 12 años de cárcel por la muerte de un joven en Vallecas

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a Francisco Mansilla Cubero, agente del Cuerpo Nacional de Policía, a 12 años de reclusión mayor e inhabilitación durante el tiempo de condena por el homicidio del joven Miguel Colorado, ocurrido en Vallecas en 1985, según la sentencia hecha pública ayer.

El tribunal le condena también a que indemnice con 15 millones a la madre del joven y sus cinco hermanos. El Estado será responsable civil subsidiario ante la insolvencia del condenado.La sala indica que el procesado estaba sobre las 2.30 del 14 de septiembre de 1985 en el pub Jamaica, en la carretera de Perales del Río, sin uniforme y fuera de servicio, con unos amigos. Al oír un fuerte ruido salió y encontró a un grupo de jóvenes junto a un Chrysler 150 con un cristal roto.

El procesado agarró a dos de ellos, José Pérez y Miguel Colorado. Este "propinó al procesado un cabezazo, una patada y empujones, que hicieron que el agente regresara al bar".

Camino estrecho

Mansilla había decidido poner los hechos en conocimiento de la policía, pero, al no haber teléfono en el pub, tomó su vehículo y se dirigió con un empleado del establecimiento a Vallecas para llamar a la policía desde esa zona. Cuando apenas habían recorrido 100 metros vieron al grupo de jóvenes (cuatro hombres y una mujer) que caminaba en la misma dirección que el procesado. Éste hizo un cambio de luces con su vehículo para que se apartaran del estrecho camino. Sin embargo, al no retirarse, optó por por adelantarles, pero golpeó con el coche a Sonla San Narciso, por lo que los cuatro jóvenes comenzaron a lanzar piedras contra el vehículo y a gritar insultos y amenazas.El procesado se apeó del turismo pistola en mano, y realizó dos disparos al aire. José Pérez y Francisco Romero se agazaparan tras un montículo, mientras que otro joven salió huyendo.

Miguel Colorado, que se encontraba agachado a unos dos o tres metros del vehículo e iluminado por los focos, gritó a sus compañeros que los disparos eran de fogueo. El policía hizo entonces un tercer disparo, que alcanzó a Miguel, quien murió en breves instantes.