El Nápoles sigue adelante en la denuncia contra Maradona
El presidente del Nápoles, Corrado Ferlaino, ha decidido no perdonar a Diego Armando Maradona y ha comunicado a la sociedad Diarma, representante del jugador, la denuncia presentada recientemente por incumplimiento de contrato. La comunicación de la denuncia significa que Diarma tendrá que comparecer ante el juez el próximo día 20, junto con el Nápoles."No entiendo el comportamiento del Nápoles. Una sociedad que desea quedarse con un jugador no lo lleva ante los tribunales", dijo Giovanni Verde, representante de Diarma.
El club decidió denunciar a la sociedad representante de Maradona por considerar que las reiteradas ausencias del jugador de los entrenamientos y de algunos partidos perjudica la imagen del futbolista y como consecuencia daña a la entidad, pues de su comercialización se reparten los beneficios ambas sociedades.
Los medios deportivos italianos sostuvieron en su día que el Nápoles no comunicaría la denuncia a Diarma, trámite ¡mprescindible para que el caso llegara a los tribunales. El Nápoles ha pedido autorización al tribunal para no pagar la suma que debe abonar a Diarma hasta el vencimiento del contrato el 30 de junio de 1993 y, al mismo tiempo, ser indemnizado por el per juicio sufrido con el 30% de lo entregado -unos 150 millones de pesetas-, desde el 1 de junio de 1988, fecha de entrada en vi gor del contrato, hasta ahora.
Según el contrato, el Nápoles paga a Maradona una cifra mensual y Diarma, a su vez, abona al Nápoles el 50% de los ingresos de los contratos comerciales de la imagen del jugador.
La notificación de la denuncia se produce también en vísperas de la audiencia sobre el caso Sinagra, proceso sobre la presunta paternidad de Maradona planteado por Cristina Sinagra. El futbolista, mientras tanto, parece haber decidido pasar las Navidades en Italia, sin viajar a su país o a Viena, donde está su hermano Hugo. El Nápoles teme que si el jugador viaja no vuelva, aunque su ciclo, en todo caso, parece terminado en el club antes de cumplir los dos años de contrato que le restan.
