Manuel Benítez

El cordobés, estudia una oferta que, de plasmarse, supondría una espectacular reaparición del torero en los ruedos. El retorno se produciría en la plaza de toros de Nimes (Francia) en mayo de 1991, precedido de una importante promoción y con la actuación de Benítez como padrino en la alternativa del novillero Juan Serrano, Finito de Córdoba, informa José Luis Rodríguez. El empresario Simón Casas, que, a través de atractivas ofertas económicas ha conseguido centrar en Nimes buena parte de la atención taurina española -otro novillero puntero, Jesulín de Ubrique, se estrenó allí como matador de toros este año-, intenta convencer tanto a El Cordobés como a Finito para que acepten. En los ambientes taurinos cordobeses se da casi por hecho el acuerdo. Manuel Benítez, apartado de los ruedos desde hace años, se mantiene en buena forma física, y más de una vez ha sorprendido a sus amigos con una agilidad poco usual en un hombre de 55 años. Además de practicar el tenis, el diestro hace gimnasia y corre largos trayectos todos los días. Y durante la temporada pasada actuó como preparador fisico de Finito de Córdoba. Serrano, con un estilo de toreo completamente distinto al de El Cordobés, no ha ocultado su admiración por el torero de Palma del Río y ha repetido que le gustaría tenerlo por padrino.