González emplaza a los socialistas a mantener un partido abierto y flexible

El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Felipe González, clausuró ayer en Gerona el sexto congreso del Partit deis Socialistes de Catalunya (PSC-PSOE) con un discurso en el que evocó el congreso de Suresnes, celebrado en 1974 en idéntica fecha que ayer, para emplazar a los socialistas a mantener el espíritu abierto y flexible que permitió convertir el "viejo tronco común del PSOE" en la fuerza mayoritaria de la izquierda.González, en una reunión con periodistas, consideró una "propuesta errónea" la petición de que se incorporen ministros a la ejecutiva del partido, "porque", dijo, "tiene que estar claramente diferenciada la dirección de un partido con la dirección del Gobierno".

La presencia de González en el congreso de los socialistas catalanes, por primera vez desde su llegada al Gobierno en 1982, fue interpretada por los congresistas como un respaldo a su secretario general, Raimon Obiols, que ayer fue reelegido, y a sus propuestas de un partido pluralista.

González defendió también a los aparatos de. partido. "Ellos son los que hacen posible que nos reunamos en actos como éste y que se ganen elecciones", dijo. Pero advirtió que los aparatos tienen una tendencia a cerrar filas cuando, con razón o sin ella, se sienten agredidos, ya sea desde dentro o desde fuera del partido.

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