George Karl, destituido como entrenador del Real Madrid

George Karl fue destituido ayer por Ramón Mendoza como entrenador de] equipo de baloncesto del Real Madrid. Fue la crónica de una destitución anunciada que se retrasó tan sólo 24 horas. Ése fue el tiempo que Mendoza invirtió en intentar conservar en la sección al técnico y a Wayne Brabender, que será el próximo entrenador.

"No estoy aquí para ofrecer una conferencia de prensa", dijo Mendoza a los periodistas, "sino para decir adiós a un ser humano excepcional que es George Karl". Mendoza lamentó públicamente "no haber conocido humanamente antes y mejor a este hombre", pero no explicó el porqué de su destitución. El presidente del Madrid tan sólo argumentó: "Hace dos meses la sociedad decidió que había que reestructurar la sección de baloncesto", y negó que Ferrándiz hubiera influido en lo ocurrido.Mendoza reconoció que la destitución de Karl "fue una decisión dificil de tomar y de comunicar", a la vez que dejó una puerta abierta: "Espero poder contar con su apoyo y su consejo, y no descarto que en el futuro pueda volver".

En las últimas horas, el presidente del Madrid intentó mantener en la sección dé baloncesto a Karl, a la vez que incorporar a Brabender. Se estudió la posibilidad de que Brabender fuese el segundo de Karl o que éste pasara a convertirse en apoderado general. Pero no hubo acuerdo.

George Karl, serio y en algunos momentos emocionado, alegó "no recordar los motivos por los que el Madrid ha decidido prescindir de mí". El técnico sí quiso en cambio despedirse del Madrid, "que siempre contará con mi lealtad". Karl se lamentó de la falta de diálogo que ha existido con los responsables del club: "Es lamentable que no hubiéramos hablado antes como lo hemos hecho ahora", aunque una y otra vez repitió: "No llego a entender los motivos que ha tenido Ramón Mendoza para tomar esta medida, ni creo que los llegue a comprender nunca.

Pienso que es una decisión equivocada". Wayne Brabender se hará cargo del equipo para la próxima temporada, aunque Mendoza no quiso hablar ello: "Ahora estoy despidiendo a Karl, no es momento de hablar de eso". Luego, al final, Mendoza abrazó a Karl, que no pudo contener las lágrimas.