_
_
_
_
_

Arnold Schwarzenegger

El actor, en el lugar que siempre soñó

GENTE

El actor norteamericano de origen austríaco Amold Schwarzenegger está convencido de que logrará poner en plena forma a los habitantes de EE UU. Schwarzenegger, que a principios de esta semana fue nombrado responsable del Consejo Presidencial de Aptitud Física y Deportes, se está tomando muy en serio su nuevo trabajo y quiere implantar la máxima griega mens sana, corpore sano en todos los hogares de este país.La primera orden del nuevo ministro del fitness será la de solicitar a todos los Gobiernos estatales que obliguen a las escuelas a impartir a diario sus asignaturas de Educación Física. "En estos momentos sólo Illinois obliga a sus alumnos a realizar ejercicios cada día y ha llegado la hora de que todos hagan lo mismo", ha comentado el actor en Washington.

Schwarzenegger no quiere defraudar a su presidente y mucho menos fracasar en el primer trabajo oficial que le ofrece su país de adopción. El actor, un declarado republicano y amigo personal del presidente austriaco, Kurt Waldheim, está casado con la sobrina del senador demócrata Edward Kennedy, la locutora y estrella de televisión María Shriver.

El nuevo responsable de la cultura física norteamericana se ha convertido en una de las vacas sagradas de Hollywood, ha conseguido una gran popularidad y se ha hecho multimillonario gracias a películas como Conan, el Bárbaro; Comando; Running man; Terminator; Depredador; Red Heat, y Gemelos.

Schwarzenegger siempre ha demostrado tener cerebro además de músculos. En 1963 llego a EE UU con una bolsa de deporte y un título, el de Mister Europa, que le acreditaba como uno de los reyes del culturismo. Su cuerpo asombró en California y decidió quedarse en EEUU para probar suerte, y la tuvo.

En los años setenta sus éxitos como atleta le hicieron famoso en EE UU -ganó cinco títulos de Mister Universo y siete de Mister Olympia-. Su imagen posibilitó su entrada en el mundo del cine, donde alcanzó el estrellato casi de inmediato. En Hollywood se comenta que Arnold, como se le conoce en las colinas de Beverly Hills, es una mezcla de King Kong, Fred Astaire y Bruce Lee.

Los pinitos cinematográfico de Schwarzenegger coincidieron con la publicación de varios éxitos de venta sobre culturismo y cultura física y sus estudios superiores de economía. Sus negocios inmobiliarios han funcionado a pleno rendimiento y sus consejos a las mujeres sobre ejercicios fisicos han sido también un éxito. Fueron memorables sus clases de gimnasia en centros de reclusión de mujeres.

Estados Unidos le dio la posibilidad de poner en marcha sus proyectos y, a pesar de su acento, sus músculos y la difícil pronunciación de su nombre, Schwarzenegger se abrió camino y todos conocen ahora su devoción por Andy Warhol, sus conexiones políticas, su buena relación con los Kennedy, la buena salud de sus cuentas corrientes y su amistad con Bush. Su nuevo cargo político no es más que un reflejo de su éxito personal y de que se halla en la cumbre: el lugar que siempre soñó.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_