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Banesto amenaza con impugnar las juntas de Cementos del Atlántico y Cementos del Mar

Las juntas extraordinarias que se celebraron ayer en Madrid de Cementos del Atlántico y Cementos del Mar, ambas encuadradas en el grupo Valenciana de Cementos, consiguieron enconar aún más las posturas enfrentadas entre las familias Serratosa y, Garnica con Banesto, a raíz de la venta del 13,5% de Valenciana a la empresa noruega Aker, operación que no conocía el banco. Las juntas fueron un calco de los consejos de administración y las posturas son cada vez más opuestas.

Al final de ambas juntas los representantes del banco anunciaron que las impugnarían y que ejercerían las acciones de responsabilidad contra los consejeros que han aprobado la aprobación. Todas las peticiones de información que fueron solicitadas por los representantes de Banesto, Dositeo Barreiros y Salvador Salort, fueron rechazadas por la presidencia.José Serratosa, presidente de ambas cementeras, declaraba tras las juntas que se había decidido no modificar "ni la composición ni los miembros del los consejos de administración".

Se entra ahora en una dinámica de pleitos entre la familia Serratosa y la entidad bancaria que puede durar meses. En este sentido, tanto una parte como otra mantienen que los tribunales les darán la razón. El banco, al igual que ocurriera en las sesiones de los consejos de administración celebrados anteayer, y por estar en minoría, no logró sacar adelante sus propósitos. Incluso ha visto cómo perdía los poderes ejecutivos Salvador Salort, consejero de Cementos del Atlántico y hombre de plena confianza de Mario Conde, que en la actualidad lleva adelante una reorganización del grupo cementero bajo la supervisión directa de Arturo Lomaní, consejero ejecutivo del área industrial del banco.

El control

Mientras que representantes de la familia Serratosa señalaban que la participación del banco en Cementos del Atlántico era de del 19%, el banco insiste en que controla "formalmente" hasta el 66% de la cementera. En Cementos del Mar se reconoce una participación de Banesto del 50% aunque el banco señala que formalmente tiene una participación del 72%.Al final las votaciones mandaron y tanto la junta de Cementos del Atlántico como de Cementos del Mar acordaron que no procedía hacer variaciones en el consejo de administración. Estas juntas extraordinarias fueron solicitadas por el banco y publicadas en el BOE los días 22 y 23 de noviembre con vistas a ampliar el número de consejeros una vez que la entidad bancaria iba recomponiendo el accionariado del grupo cementero para darle una mayor racionalidad y ligarlo a la gestión de la entidad bancaria.

Mientras tanto, José Serratosa, presidente de Cementos del Atlántico, que contaba con todos los poderes del consejo, ha firmado la operación de venta del 13,5% del capital de Valenciana de Cementos a la firma Noruega Aker. Ese porcentaje se encontraba casi en su totalidad en la cementera de Cementos del Atlántico.

Esta venta, apoyada por tres miembros del consejo de los cinco que lo componen, ha supuesto el primer gran golpe al grupo industrial de: Banesto, pese a que según el banco sólo supone la quinta parte de la capacidad de producción del grupo cementero.

Ahora, unidas las acciones de la familia Serratosa, de la familia Garnica y de la empresa noruega Aker, suponen mayoría absoluta en Valenciana de Cementos. José Serratosa informó ayer que por el momento no se estudian nuevas operaciones de venta en empresas del grupo. Banesto, por su parte, aún no ha decidido las medidas jurídicas que al final tomará para deshacer una operación que entiende "fraudulenta por que se ha hecho a espaldas del primer accionista".

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