Un equipo unido al triunfo y a la tragedia

El Liverpool llega a Madrid investido como el gran equipo europeo de los últimos 25 años. Su dominio en la Liga inglesa ha sido paralelo a sus continuos triunfos en las competiciones europeas. Los reds han conseguido tres Copas de Europa y una de la UEFA. La marcha triunfal se detuvo en Heysel. Desde entonces, la estela del Liverpool esta tan asociada a la tragedia como a la victoria.La todavía reciente masacre de Hillborough, donde perecieron casi un centenar de hinchas del Liverpool, mostró el carácter del equipo de Anfield Road. Lejos de derrumbarse, el club protagonizó un final de temporada inolvidable. Pocas semanas después derrotó al Everton, el otro equipo de la ciudad, en la final de la Copa. inglesa. Sólo el Arsenal se atrevió a detener al Liverpool en el último partido de Liga, precisamente en Anfield Road. Ante la desolación de la célebre Kop -la tribuna que acoge a la hinchada más leal del equipo-, el Arsenal le arrebató el campeonato de Liga.

John Toshack dijo ayer que el Liverpool cambia de nombres, pero su estilo y su deseo de victoria continúan. El hombre que instala ahora esa idea es Kenny Dalglish, un escocés lacónico que conduce al equipo desde hace cuatro temporadas.

Dalglish sigue la línea de otro escocés, Bill Shankly, el gran hacedor del Liverpool durante los años sesenta. La base estratégica es la misma en los dos. Se trata de mantener el balón, pasarlo en buenas condiciones, es decir, rasearlo, y observar una actitud victoriosa y combativa durante todo el partido. Por muy simples que parezcan estas premisas, casi todas en las antípodas del fútbol inglés.

El Liverpool jugará en Chamartín con todas sus estrellas, incluido el sueco Hysen, defensa que procede de la Fiorentina. Hysen acostumbra a jugar de líbero, puesto del todo inhabitual en el fútbol británico. La plantilla está integrada por jugadores de la talla de Steve Nicol -el mejor jugador del Reino Unido en opinión de buena parte de la prensa y de Ricardo Gallego-, el genial John Barnes, Peter Beardsley, Steve McMahon, Houghton y lan Rush.

La constelación de astros deja fuera de la alineación titular al ariete John Aldridge, cuyo traspaso a la Real Sociedad podría concretarse hoy. Dalglish alineará probablemente a Grobelar, Ablett, Nicol, Hysen, Hansen, Burrows; Whelan, Mac Mahon, Barnes; Beardsley y Rush.