El Ejecutivo busca más datos sobre la banda armada

El Gobierno trata de ampliar su información sobre la situación interna de ETA, cuyo sector más duro -localizado fundamentalmente en el sur de Francia-, es el que parece haber optado por una clara amenaza de ruptura de las conversaciones y de vuelta a la actividad terrorista.A juicio de un alto cargo de la Moncloa, consultado por este periódico, "toda prudencia es poca" en estos momentos. "¿Con cuál de los comunicados del pasado viernes hay que quedarse?", se preguntan dichas fuentes, en referencia a la catarata de comunicados que se produjo anteayer desde la Koordinadora Abertzale Socialista (KAS), Herri Batasuna y la propia ETA, todos ellos distintos entre sí, al menos en cuanto al lenguaje y tono empleados.

Medios gubernamentales destacaban ayer los "positivos resultados" del viaje del presidente del Gobierno, Felipe González, a París, en el que se entrevistó con el presidente de la República francesa, Frangois Mitterrand, y con el primer ministro, Michel Rocard. Resultados, en cualquier caso, que superan el problema terrorista, puesto que éste se encuentra "perfectamente encauzado" a través de los respectivos ministerios del Interior.

A la última parte del encuentro con Mitterrand asistió también el ministro francés del Interior, Pierre Joxe, a quien España ha concedido la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil, según un decreto publicado ayer.