El Banco Hispano Americano generó beneficios netos de más de 32.000 millones de pesetas en 1988

El presidente deL Banco Hispano Americano, Claudio Boada, afirmó en conferencia de prensa, previa a la Junta General de Accionistas celebrada ayer, que las últimas disposiciones del Banco de España costarán a la entidad unos 5.000 millones de pesetas. Ante sus accionistas, aseguró que el banco tiene el propósito de 'intensificar profundamente la cooperación con otros; bancos europeos con intercambio o no de participaciones accionarias". La entidad repartirá un dividendo de 170 pesetas por acción tras registrar en 1988 unos beneficios netos para el grupo de 32.067 millones de pesetas.

Las últimas disposiciones del Banco de España, es decir, la elevación del coeficente de caja en 1,5 puntos y la circular denominada "de transparencia bancaria" (fijación de la fecha de valoración de las operaciones de clientes) supondrán para el Banco Hispano Americano un coste cercano a los 5.000 millones de pesetas, según explicó el presidente de la entidad. En concreto, la primera disposición supondrá 2.600 millones y la segunda 2.300. Boada aseguró que entendía la elevación del coeficiente como medio para contener la inflación, pero no que se realizara sobre el tramo no remunerado.Respecto al futuro de la entidad, el presidente del Hispano aseguró a sus accionistas que una penetración de mayor entidad en Europa "debe intentarse por vías distintas y en todo caso además de las posibles fusiones nacionales, que, por una parte, están mostrando ciertas dificultades, y por otra, no sitúan al banco español resultante entre los primeros puestos europeos". La mejor alternativa, en su opinión, es incrementar la colaboración con bancos europeos.

Mercados internacionales

En este sentido, aseguró que el Hispano ha mantenido conversaciones "con papeles" con los baneos de Europartners (Commerzbank, Banque Crédit Lyonnaise y Banco de Roma) para actuar en banca corporativa y mercado de capitales y para ofrecer y distribuir de forma conjunta determinados servicios financieros. La intención última del Hispano es llegar a establecer un acuerdo con un banco de cada país europeo.

En la conferencia de prensa, Claudio Boada anunció que la próxima salida a los mercados internacionales por parte de la entidad tendrá lugar en Tokio, posiblemente antes de fin de año, para continuar con Londres y llegar en último término a la Bolsa de Nueva York. En la actualidad, el Hispano está presente en las bolsas de Ginebra, Basilea, Zúrich y Francfort.

Respecto a la autocartera que mantiene el banco, explicó que asciende al 4,5%. No obstante, y tras afirmar que el tema había sido tratado con el Banco de España, justificó tal porcentaje debido a la emisión de bonos con warrants (convertibles en acciones) que equivalen al 3%. del accionariado del Hispano, lo que implica "que lo que es el 3% para el Banco de España, para mí sea cero".

Aseguró asimismo que no venderá bancos filiales e insinuó que entidades del grupo como el Banco Mercantil de Tarragona y el Banco del Norte podrían ser la base de algún banco especializado. A preguntas sobre el tema de las primas únicas, contestó que el banco como tal no había hecho ni una sola y que la lista de suscriptores de la aseguradora La Estrella, en la que el Hispano es accionista mayoritario, sólo se entregaría a requerimiento del juez.

Claudio Boada justificó la venta del Banco Urquijo Unión tras su saneamiento y explicó que tal venta, junto con la salida a bolsa del 25%, de Hispamer, han supuesto para el Hispano un beneficio conjunto de 33.358 millones de pesetas. El Hispano repartirá un dividendo de 170 pesetas por acción, tras haber obtenido en 1988 unos beneficios netos de 32.067 millones de pesetas y haber dedicado a provisiones más de 80.000.