El INI invertirá este año 275.000 millones de pesetas para consolidar su proceso de saneamiento

El Instituto Nacional de Industria (INl), que ha cerrado el año pasado con resultados positivos por primera vez desde 1975, invertirá este año 275.000 millones de pesetas dentro de su política de normalización empresarial, que finalizará en 1993 con su desvinculación respecto a los Presupuestos Generales del Estado. La estrategia inversora del grupo comenzará a diversificarse al finalizar algunos de los procesos de reconversión. El grupo público facturó al término del año 1,8 billones de pesetas, con unos beneficios antes de impuestos de 31.000 millones, de acuerdo con los datos del balance presentados ayer por su presidente, Jordi Mercader.

Jordi Mercader calificó de "clave" el logro de sus antecesores en el INI al mejorar en tres puntos el margen comercial -diferencia entre costes e ingresos-, y puso de relieve la voluntad del instituto de "continuar en su estrategia de reducción de pérdidas, saneamiento financiero, estrategia de desinversiones y profesionaliz ación de las actuaciones del grupo en un entorno de mercado".Los resultados positivos del INI suponen la ruptura de una tradición de más de diez años, en los que el instituto acumuló unas pérdidas superiores a los 1,7 billones de pesetas.

Una de las lineas maestras de la estrategia futura del INI consistirá, según Mercader, en reducir la enorme sensibilidad de sus resultados frente a la coyuntura económica. "Al margen de la evolución en los precios de materias primas, una variación de un 1%. en los tipos de interés repercute en 12.000 millones de pesetas en los resultados del grupo; una variación del 1% en los tipos de cambio, repercute en más de 1.000 millones; un 1% de variación en el IPC supone un salto de 4.000 millones de pesetas en nuestros costes salariales". La plantilla del INI se redujo en 5.000 personas durante 1988, situándose en 156.259 trabajadores.

La totalidad de los beneficios y el 60% de las ventas del grupo son realizados por un conjunto de empresas que absorben solamente al 37% de la plantilla; mientras que, en sentido contrario, la totalidad de las pérdidas tienen lugar en un conjunto de filiales que suponen el 40% de las ventas y un 63% de la plantilla. "La mejora se produce en aquellos sectores que son intensivos en términos de capital, frente a aquellas industrias intensivas en mano de obra", señaló Mercader.

La cifra de inversión presupuestada para este año por el instituto, 275.000 millones de pesetas, supone un incremento del esfuerzo realizado en 1988 (227.000 millones) y una vuelta al nivel de inversión de 1987.

La finalización de los procesos de inversiones intensivas en algunos de los sectores en reconversión permitirá al INI reconducir parte de sus recursos hacia otras áreas de su negocio. El grupo intensificará su política inversora en los negocios de transporte aéreo (50.000 millones, para hacer frente a los planes de renovación de flota de Iberia y Aviaco), y Defensa, con 18.000 millones, entre otros sectores. A lo largo del año, por otra parte, el INI recortó su endeudamiento en casi 87.000 millones de pesetas, situándose al cierre del ejercicio en 1,6 billones, cifra que Mercader calificó de "aún demasiado alta".

Durante este año, el INI continuará con su política de venta de participaciones en algunas de sus sociedades.

El instituto comenzará a trabajar en el último trimestre de este año en la anunciada salida a bolsa de Iberia, sociedad que, por otra parte, "registrará al cierre de este ejercicio los efectos de la actual situación de conflictividad, que ha supuesto ya para la compañía un coste de 6.000 millones de pesetas",según Mercader. El presidente del INI ratificó, por otra parte, la intención del instituto de sacar un paquete de acciones de Unelco al mercado de valores. La salida a bolsa de Ence y Endesa supuso para el instituto unas plusvalías de 93.000 millones de pesetas, dedicados a cubrir parte del plan de inversiones.

Mercader aludió igualmente a la voluntad del INI de cerrar el proceso de traspaso de sus filiales MTM-Ateinsa a la Alsthom. El saneamiento de MTM y Ateinsa, previo a la operación, costará al grupo español unos 20.000 millones. Para el presidente del INI "no se han producido retrasos importantes en esta operación, que está pendiente de la conclusión de las auditorías.

Procesos de cambio

El instituto prevé, además, cerrar los procesos de cambio en las alianzas suscritas en el negocio aeroespacial y del Aluminio, pendientes tras la retirada de Northrop y Alcan.

Otro de los procesos abiertos es la negociación entre FESA, indirectamente controlada por la Kuwait Investment Office (KIO), y la Empresa Nacional de Fertilizantes para encontrar una vía de fusión o cooperación.

El INI ha comenzado a estudiar la toma de una participación mayoritaria en la división de defensa de ERT, también dentro de la órbita de KIO, en un proceso "inicial, y que se desarrolla con absoluta independencia de los contactos sobre fertilizantes", según Mercader.